Diariamente se sabe de alguien que quiere vender una propiedad raíz. Hay quienes desean probar fortuna por sí mismos y ahorrarse la comisión de un agente de Bienes Raíces. Otros simplemente llaman a un corredor certificado y colocan en las manos de un especialista la futura venta. Tanto los unos como los otros tienen razón; pero veamos algunos aspectos esenciales en toda transacción de Bienes Raíces.
No siempre obtener el mayor precio por una propiedad representa la mejor alternativa para un vendedor. Existen elementos financieros y legales que no se pueden obviar cuando se toma una decisión pues de hacerlo, el vendedor pudiera enfrentar inconvenientes que a veces implican tiempo, dinero y preocupaciones el resolverlos.
El contrato de compra-venta es la columna vertebral en toda transacción de bienes raíces; pero jamás un contrato puede representar una venta por sí solo. La venta se materializa, únicamente, al momento de traspaso de documentación al cierre de las negociaciones.
[bctt tweet=»Qué hacer cuando el comprador de su casa se escapa… » username=»hispanicla»]El desconocimiento de ello hace posible que algunos consideren sus propiedades vendidas y al cabo de un tiempo tengan que recomenzar nuevamente el proceso, puesto que el comprador se escapó por el primer recurso legal que tuvo a su alcance.
Los compradores de hoy están mejor informados y mejor representados que en tiempos pasados. Existen leyes que protegen al comprador y que normalmente no son de dominio público, pero los profesionales en bienes raíces las conocen. Al igual, conocen las responsabilidades y obligaciones que un vendedor debe observar durante la venta.
Actualmente la cibernética y la informática dominan el mercadeo. Resulta relativamente fácil ofrecer a la venta una propiedad a través del Internet; pero todo ello no puede compararse al profesionalismo, pericia y recursos que ofrece un agente licenciado de la industria de bienes raíces, para promover la venta de una propiedad inmobiliaria.
La venta de un inmueble implica:
- Factores de seguridad física y familiar al tiempo de mostrar la propiedad.
- Asesoramiento legal y financiero.
- Planificación, para atender, negociar, mostrar y mantener la propiedad en el mercado.
- Desarrollo de un plan de mercadeo efectivo para promover la venta.
- Preparación psicológica y técnica para oír ofertas y negociar contratos.
- Asesoramiento de profesionales especializados en bienes raíces.
- Conocimiento del mercado para determinar el precio de la propiedad.
Piense que un agente de bienes raíces estará trabajando para usted, en la venta de su propiedad, mientras usted continúa su rutina, sin restarle atención a su familia y a lo que usted mejor sabe hacer: su trabajo diario.
