A pesar de que el empleo mundial esta en su nivel mas alto y solo en el mes de octubre, en Estados Unidos se agregaron 261.000 puestos de trabajo, las ideas de crecimiento y estabilidad se están diluyendo. Las empresas tecnológicas anuncian una cantidad alarmante de despidos masivos, congelamiento de contratación y reducción de gastos. Esto se debe a que 2020 y 2021 fueron los años de mayor concentración de ventas en pocas empresas tecnológicas. Pero 2022 vio aparecer una gran cantidad de competidores con ofertas sumamente atractivas.
Hasta mediados de 2022 el valor de una empresa tecnológica se basaba en sus posibilidades futuras. Pero el paradigma de los sharks investors, “adquirir valores baratos en vista de una capitalización futura”, se destruyó con la caída estrepitosa de las criptomonedas, donde muchos soñaron que eran multimillonarios y en pocos meses perdieron todos sus ahorros y propiedades.
Ante esta señal los inversores comenzaron a mirar el presente más que al futuro, a revisar ganancia reales, analizar planes de crecimiento sustentables y reconfigurar sus inversiones en empresas económicamente más realistas.
Muchas empresas tecnológicas no pueden cumplir con estos requisitos y, al ver caer el valor de sus acciones, deben pensar en despidos, congelamientos de incorporaciones y control de gastos.
Meta Platforms Inc. – “Este es un momento muy triste”, dice Mark Zuckerberg, presidente de Meta al despedir al 13% del personal. Explicó que la restructuración laboral será acompañada de cambios estructurales. Zuckerberg estableció que el 70% del personal trabajará desde su casa. Quienes regresen a las oficinas tendrán el uso compartido del escritorio. Este cambio le permitirá vender varias propiedades y congelar los alquileres y gastos de todas las demás.
Meta es propietaria de Facebook, WhatsApp, Instagram y Oculus VR, con 87,314 empleados a fines de septiembre de 2022. Experimentó un aumento interanual del 28%, al incorporar 17,000 empleados para el desarrollo del fracasado Metaverso.
Twitter – Elon Musk compró Twitter y, al día siguiente despidió a su director ejecutivo y otros altos ejecutivos; poco después, redujo la planta laboral en un 50%.
Amazon anunció, ante la caída del valor de sus acciones en más del 47% este año, que congelará la contratación de nuevos empleados, para restructurar su staff y robotizar al máximo sus depósitos,
Apple congeló las contrataciones, excepto en investigación y desarrollo, ante el lento crecimiento de las ventas. Las acciones de Apple han bajado un 25% en lo que va del año.
Bitcoin y otras cripto han dejado en la calle a miles de personas en solo un mes. Netflix analiza despidos masivos y recortes de gastos. Shopify despidió a 1,000 empleados en junio; Tesla, a 950 en julio.
Uber y Lyft, ante la caída del valor de sus acciones despedirán al 13% de sus empleados
TikTok y Google afectados por la caída de anunciantes, también analizan despidos masivos y congelar las incorporaciones,
Stripe despedirá a alrededor del 14 % de su personal; Better.com despidió a 900 trabajadores; Carvana a 2,500… y la lista continúa.
Las crisis económicas mundiales no solo afectan las energías (petróleo, electricidad, gas), y los alimentos (trigo, soya, maíz), sino también a los negocios virtuales. Vivimos en medio de cambios profundos en las tecnológicas. En 2023 ingresaremos a la Web 3.0, que será mucho más interactiva… pero de esto hablaremos en la próxima nota.