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Medi-Cal y las desigualdades raciales en el parto

Foto: TheLawleys

El programa de salud que llega a 16 millones de californianos está ampliando sus cuidados maternos. Y se extiende a las personas embarazadas a través de las “doulas”, un apoyo que va desde la concepción a los 12 meses de posparto. Ethnic Media Service (EMS) y Black Mirror, junto al Departamento de Servicios de Atención Médica (DHCS), organizaron una conferencia de prensa sobre esta propuesta, pionera en el país.

“A medida que el DHCS continúa transformando Medi-Cal, el programa está ampliando el acceso a la salud materna a través de los servicios de doulas; es decir, asistentes de atención del parto profesionalmente formadas y que ayudan a las pacientes desde la concepción a los 12 meses de posparto. Las doulas no estaban contempladas en el servicio de maternidad anterior, pero a partir de ahora han sido incluidas en Medi-Cal”, dijo Sandy Close, directora de EMS, al abrir la conferencia de prensa del pasado 4 de junio. “Los expertos consideran que las doulas son esenciales para cerrar las disparidades raciales y étnicas en los nacimientos de bebés; tanto los afro-estadounidenses como los indios-estadounidenses, latinos y asiático-estadounidenses e isleños del Pacífico, ya que pueden ayudar a reducir las cesáreas, las epidurales, los partos prematuros y el bajo peso al nacer”.

Un programa pionero

Erica Holmes, jefa en la División de Beneficios del DHCS, definió esta nueva expansión de Medi-Cal explicando que “Medi-Cal cubre la mitad de los partos en California y el DHCS ha hecho esfuerzos significativos para reducir la muerte y disparidades étnicas y raciales en los partos tanto en mujeres afro-estadounidenses como latinas y asiáticas-estadounidenses y de las islas del Pacífico. Este servicio de apoyo ha cambiado drásticamente en los últimos años, ya que Medi-Cal está prestando servicios de salud desde antes del parto y hasta tres meses después, independientemente del resultado del nacimiento.  Esto incluye salud física, mental y social”.

-¿Qué es lo renovador del nuevo programa de salud materna?

-Una de sus fortalezas es que está centrado en las necesidades culturales y de lenguaje de cada persona. Está llegando a los usuarios a través de proveedores tradicionales o alternativos, es decir, de doulas y parteras. Las doulas proveen cuidados culturalmente competentes utilizando intervenciones tempranas e incluyendo el apoyo a padres y niños, tanto antes como después del parto. Esto es muy importante para ayudar a las etnias más desfavorecidas a equilibrar las disparidades en el ámbito sanitario. Las doulas también proveen recurso comunitario, desde la prevención de la violencia a servicios de abogacía.

-¿Cómo se contactan las doulas?

-Los miembros de Medi-Cal no necesitan una recomendación especial para el servicio de doulas. Si quieren, pueden buscar directamente una doula que les acepte Medi-Cal y empezar a recibir cuidados. Para encontrar doulas, se ha creado un directorio por condado, teniendo en cuenta temas como el lenguaje y la etnicidad. Ese directorio se actualizará regularmente. En mayo, el DHCS informó que tenemos 450 aplicaciones de doulas y 360 han sido aprobadas. Los reembolsos a los servicios de doula son los más altos de la nación y estamos muy contentos con la interacción que hemos recibido.

-¿California es un estado pionero al incluir a las doulas en un plan de salud?

-Hay diferentes programas en el país que están abordando estos servicios para mejorar prácticas y reducir barreras étnicas, pero lo que se está haciendo en California no tiene parangón. La idea es que los miembros de la comunidad tengan distintas opciones de doulas o parteras acuerdo a sus experiencias.

“Una de las fortalezas de este programa de Medi-Cal es que está centrado en las necesidades culturales y de lenguaje de cada persona. Está llegando a los usuarios a través de proveedores tradicionales o alternativos, es decir doulas y parteras. Las doulas proveen cuidados culturalmente competentes utilizando intervenciones tempranas e incluyendo el apoyo a padres y niños antes y después del parto. Esto es muy importante para ayudar a las etnias más desfavorecidas a equilibrar las disparidades en el ámbito sanitario”.
Erica Holmes

Dignidad laboral para las acompañantes de parto

Kairis Chiaji, proveedora de doulas para Medi-Cal, narró su experiencia en el programa.

“He sido doula por 25 años y si bien hay muchos estados que cubren este servicio, Medi-Cal lo ha llevado a un nivel mucho más alto, poniendo en valor un trabajo tan importante», dijo Chiaji. «Mucha gente no sabe lo que hacen las doulas y por eso lo quisiera contar. Nuestro trabajo es muy parecido al de un entrenador personal. Buscamos conocerte, saber cuáles son tus objetivos, conocer tu cuerpo, tu bebé y ayudarte a tener un plan brindándote las herramientas que necesitas, ya sea en hospitales o en clínicas. Así, podemos empezar a trabajar en el futuro parto y también en el futuro posparto”.

-¿Cuáles son las dificultades más frecuentes de las futuras mamás?

-Las principales dificultades son las diferentes barreras culturales y de lenguaje. Por eso entendemos mejor que nadie el beneficio de ser un puente entre un miembro de la comunidad y el parto. El término posparto se define dentro de los primeros 42 días, pero los que tenemos hijos sabemos que eso es sólo el principio. ¿Qué pasa si al dar de mamar se presentan problemas en el día 43? ¿Y qué pasa cuando hay niños adicionales en el hogar y no son integrados? De todo esto se ocupan las doulas también.

-¿Cómo ves la salud maternal en los Estados Unidos?

-Nuestro país y nuestro estado están atravesando una crisis de salud maternal; hay muchas pérdidas y la estadística nos dice que el 80% se podían prevenir. Las personas de color o indígenas, tienen tres veces más probabilidades de pérdidas. Por eso es importante saber que las doulas podemos llenar muchos de esos huecos y amplificar las voces de las familias. Podemos reconocer cuando algo no está bien y ayudar a nuestros clientes no sólo en el parto sino en lo legal y en lo comunitario. Tenemos esa experiencia y ese conocimiento. Hemos hecho este trabajo por décadas y podemos entrenar a otras personas para que lo hagan. Con muchas de nosotras, cada comunidad puede tener una mejor solución para esta crisis.

-¿Qué significa ser una proveedora de Medi-Cal?

-Es algo maravilloso. Antes, las doulas no teníamos la ayuda del estado y teníamos que enfocarnos en los resultados. Pero el estado dijo “no está bien que esas mujeres trabajen tantas horas y sólo puedan cobrar de acuerdo a los resultados. Medi-Cal no nos pide sacrificar nuestro estilo de vida para hacer un buen trabajo, y nos da la oportunidad para que podamos capacitar y entrenar a mujeres para que sean doulas en diferentes idiomas y respeten las diferentes culturas. El estado ha cambiado nuestro paradigma y también el de las mujeres que van a dar a luz.

“Antes, las doulas no teníamos la ayuda del estado y debíamos enfocarnos en los resultados pero el estado dijo “no está bien que esas mujeres trabajen tanto y sólo puedan cobrar de acuerdo a los resultados”. Medi-Cal nos da la oportunidad para que podamos capacitar y entrenar a mujeres para que sean doulas en diferentes idiomas y respeten las diferentes culturas. El estado ha cambiado nuestro paradigma y también el de las mujeres que van a dar a luz”.
Kairis Chiaji

Sobre una profesión ancestral y sanadora

Khefri Riley también es proveedora de doulas para Medi-Cal, y dijo que “el objetivo es emponderar a las comunidades marginadas. Queremos elevar las voces de las poblaciones a las que servimos, replicar y honrar el aspecto sagrado de dar a luz, que es el derecho de todas las personas. Es un honor ser parte de este beneficio de salud para que las familias reciban el cuidado que merecen”.

-¿De qué modo trabajan con el DHCS?

-Una de las formas es diseñando beneficios de doulas para implementarlos mediante Medi-Cal. Hemos estado proveyendo experiencia, abogacía cultural y consejos para beneficios de doulas para todas las personas en California, especialmente a las mujeres de color e indígenas, con el objetivo de lograr equidad de cuidado.

-¿Cómo definiría este programa?

-Es un beneficio histórico en los Estados Unidos. Esto ha tomado años del DHCS para crear algo que es muy diferente a todos los demás estados. Las doulas son de la comunidad y conectan a los pacientes con los recursos de salud y puedan ayudar muchísimo en un sistema médico racista.

-¿Qué ítems priorizan en la formación de doulas?

-La idea es generar doulas con resultados positivos no sólo en el parto sino también en el posparto, ya que muchos de los problemas maternales ocurren luego de dar a luz. La idea es acompañar a lo largo de todo el viaje reproductivo al núcleo familiar. Hace 20 años, nada de esto estaba disponible en el país. Las doulas tienen un valor cultural inmenso, ya que provienen de las parteras indígenas y de color, y el trabajo que hacen es de sanación. Es nuestra herencia de 50 mil años de historia humana. Nuestras madres ancestrales no estaban solas al alumbrar.

-¿Qué comunidades abarca el servicio de doulas?

-Nuestras doulas cubren a todas las personas, es un beneficio que no discrimina. Nuestro programa se enfoca en familias de color e indígenas, porque son las que más lo necesitan. No tiene sentido que estas mujeres corran tres o cuatro veces más riesgo de perder un hijo en el parto. Eso era antes, en el viejo estado sanitario racista. Son las doulas quienes mejor pueden reducir esta estadística.

-¿Algún caso especial de intervención que recuerde?

-Recuerdo una madre muy joven, que estaba sin una vivienda fija y contactó una doula porque recibió la amenaza de que le podían quitar el bebé en esa situación. La doula la pudo ayudar no sólo a que evitara una cesárea, sino también a crear un plan posparto para que la bebé se pudiera quedar con ella y tener una recuperación saludable. Las doulas también pueden servir como defensoras de las personas más vulnerables y nadie es tan vulnerable como quien está dando a luz.

“Las doulas tienen un valor cultural inmenso, ya que provienen de las parteras indígenas y de color, y realizan un trabajo de sanación; nuestra herencia es de 50 mil años de historia humana. Nuestras madres ancestrales no estaban solas al alumbrar y este es un beneficio que no discrimina. Nuestro programa se enfoca en familias de color e indígenas porque son las que más lo necesitan. No tiene sentido que estas mujeres corran tres o cuatro veces más riesgo de perder un hijo en el parto. Eso era antes, en el viejo estado sanitario racista. Son las doulas quienes mejor pueden reducir esa estadística. Las doulas también pueden servir como defensoras de las personas más vulnerables y nadie es tan vulnerable como quien está dando a luz”.
Khefri Riley

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