Camus creía en un humanismo que iba más allá de los credos y, aunque no sabía lo que había después de la muerte, para los vivos la tierra era nuestro Orán.
En otra triple entrega de sus Máximas y Mínimas, Rafael Carvajal nos despierta con estos aforismos que inducen a pensar, rabiar, amar, rechazar o simplemente, sorprendernos
Camus creía en un humanismo que iba más allá de los credos y, aunque no sabía lo que había después de la muerte, para los vivos la tierra era nuestro Orán.