Le(s) escribo desde Matamoros, una ciudad en México que se encuentra en la frontera con Texas, donde los niños y las familias están siendo alojados en refugios y campamentos superpoblados mientras el gobierno de los Estados Unidos niega efectivamente su derecho a solicitar asilo.
Mis colegas y yo estamos aquí con otros líderes de derechos humanos, civiles y de inmigrantes porque cuando se violan los derechos humanos, nos presentamos y tomamos medidas.
A partir de hoy, la administración de Biden está intensificando las políticas que hacen que sea casi imposible pedir asilo en la frontera de los EE. UU. y negará el asilo a las personas que huyen de situaciones peligrosas y que ingresaron ilegalmente a los EE. UU. Si el presidente Biden no cambia de rumbo, decenas de miles de niños, familias y personas sufrirán.
Las comunidades cuentan con nosotros: si desea ayudar a poner fin a estas políticas, impulse nuestro trabajo para abogar por el derecho de todas las personas a buscar seguridad haciendo una donación.
Hoy deberíamos estar celebrando el tan esperado final de una política de la era Trump conocida como Título 42, que enviaba a los solicitantes de asilo en la frontera a lugares inseguros en México o de regreso a los países de los que huyeron.
Pero no podemos celebrar, porque esto es lo que viene en su lugar:
A partir de hoy, la única forma en que alguien puede ingresar legalmente al país en la frontera es si hace una cita usando una aplicación de teléfono móvil. Nuestra nueva investigación (publicada el lunes) muestra que hacer que el uso de esta aplicación sea obligatorio para solicitar asilo viola el derecho internacional de los derechos humanos.
Las personas y las familias se embarcan en viajes tumultuosos para llegar a un lugar seguro, solo para perder sus esperanzas porque no tienen un teléfono inteligente o no pueden asegurar una cita. Hace un mes, un bebé de 4 meses que necesitaba una cirugía de emergencia murió porque sus padres no pudieron programar una cita con éxito.
Para aquellos que tienen teléfonos inteligentes, esto es lo que muchos ven cuando abren la aplicación cada mañana:
A nadie se le debe negar el derecho a garantizar la seguridad de su familia.
Ayuda a restablecer el derecho de asilo y exije cambios para que el sistema de inmigración de EE. UU. sea funcional y compasivo. Estoy viendo aquí que los refugios están llenos y las personas se ven obligadas a construir campamentos en las calles. El director de un albergue dijo que todos los días, el centro se ve obligado a rechazar al menos a 10 familias con niños. Este fin de semana, al menos 8 personas murieron y muchas más resultaron heridas después de que un automóvil arrollara a una multitud afuera de un refugio para migrantes en el lado estadounidense de la frontera en Brownsville, otro ejemplo terrible de cómo las vidas de los migrantes están en riesgo en la frontera.
Las personas y las familias enfrentan condiciones terribles y debemos actuar con rapidez. Necesitamos tu apoyo inmediato para abogar por los solicitantes de asilo, refugiados y migrantes.
Poner fin a las dañinas restricciones al asilo, proteger los derechos de los migrantes y salvar vidas en la frontera es una prioridad urgente para Amnistía Internacional. Tu donación financia recursos críticos para movilizar la defensa de base, presionar a los legisladores para que detengan estas políticas y arrojar luz sobre los peligros de estas terribles condiciones.
No podemos mirar hacia otro lado mientras el gobierno de los EE. UU. pone en peligro vidas y viola los derechos humanos: es hora de actuar.
Gracias por ayudar en este esfuerzo humanitario,
Paul O’Brien
Director ejecutivo
Amnistía Internacional Estados Unidos
PD: Estoy furioso porque la administración de Biden está implementando políticas crueles que hacen que sea casi imposible buscar asilo en la frontera, pero no pierdo la esperanza. Confío más que nunca en el poder de nuestro movimiento para impulsar el cambio. Si no estás listo para hacer una donación, puedes tomar medidas instando a la administración de Biden a proteger a las familias y las personas que buscan asilo.
