Cada día crece la lista de líderes demócratas que apoyan la candidatura de Kamala Harris a la presidencia, en reemplazo de Joe Biden que ayer dio fin a su campaña.
La probable candidata presidencial
Y aunque todavía es posible que otro líder surja entre hoy y la convención nacional demócrata, que tendrá lugar en Chicago entre el 19 y el 22 de agosto, es lógico suponer que hoy, Harris tiene las mayores probabilidades de encabezar la fórmula que en noviembre tratará de derrotar a Donald Trump.
A pesar de que Harris ha sido vicepresidenta desde enero de 2021, la naturaleza del puesto permite que se desconozcan sus posiciones sobre los temas más importantes que interesan a la comunidad.
Es el momento entonces de enumerar estas posiciones.
Es en el tema migratorio que se centrarán los ataques republicanos contra ella. La llaman falsa y burlonamente “la zarina de la frontera” y la hacen responsable por los problemas que allí se presentan. No lo es. La frontera está a cargo del secretario de Seguridad Interna Alejandro Mayorkas.
En cambio, el presidente Biden le encargó coordinar las relaciones diplomáticas para abordar las “causas fundamentales” de la migración y promover el crecimiento de las fuentes de trabajo en los principales países exportadores de inmigrantes, para que potenciales inmigrantes se queden en su país. Para ello ha estimulado la cooperación entre el gobierno y las principales empresas del país para invertir en Guatemala, Honduras y El Salvador.
Harris formó parte del acuerdo bipartidista de seguridad fronteriza logrado en el Congreso – que hubiera fortalecido la seguridad y normalizado el procesamiento de solicitudes de asilo – pero que a instancias de Trump los mismos legisladores republicanos que lo habían escrito opusieron.
Inmigración, democracia, aborto y más
En la protección del nuestro sistema democrático, Kamala Harris fue la encargada de avanzar en el Congreso una legislación que proteja el derecho al voto, para contrarrestar las restricciones establecidas en más de 20 estados. La legislación finalmente no prosperó. Ahora es una de las responsables de desafiar en la corte los intentos republicanos de limitar el derecho al voto en cada estado.
Ha sido una constante y entusiasta defensora del derecho de la mujer al aborto y luchó contra los intentos a nivel nacional y estatal para limitarlo, antes de la decisión de la Corte Suprema que dio por tierra con este derecho.
Se ha preocupado por el impacto que el cambio climático tiene sobre las comunidades pobres, donde prevalecen las minorías – latinos y afroamericanos. Como senadora propuso establecer una Oficina federal independiente de Responsabilidad por la Justicia Climática y Ambiental, idea que tampoco avanzó en el Congreso.
Como senadora, presentó una legislación que habría proporcionado un crédito fiscal de hasta 6.000 dólares para familias de ingresos medios y bajos, además de favorecer amplias inversiones en tecnologías que crean empleos.
La última palabra
Ha apoyado una versión de “Medicare para todos” que ampliaría la cobertura médica a millones de estadounidenses. Junto con Biden promovió la expansión del crédito impositivo por cada hijo así como la derogación de la ley que redujo las obligaciones impositivas de las grandes corporaciones. Finalmente, continuará la política de perdonar la deuda de los prestatarios de préstamos estudiantiles.
Es cierto que todavía no se dijo la última palabra respecto a cuál será el proceso oficial de la nominación y quién emergerá como el candidato demócrata a la presidencia.
Pero es bueno saber que las posiciones de Kamala Harris la muestran como una defensora de los derechos e intereses de la comunidad latina.
