El abogado Pedro Martínez, uno de los principales protagonistas de la inconstitucionalidad de la Amnistía de 1993 en El Salvador, junto a Benjamín Cuellar, narra cómo se gestó y cómo se luchó contra lo que se consideraba nacional e internacionalmente un adefesio jurídico.
«En 1993, tras conocido el informe que presentó la Comisión de la Verdad, auspiciada por las NNUU, el presidente Alfredo Cristiani promulgó una Ley de Amnistía (1993), en la que inconstitucionalmente se autoamnistíaba, a él como Comandante General de la FFAA y a sus principales mandos, incluidos a los líderes de la insurgencia».
«Sectores de la sociedad civil y no el FMLN, emitieron cuatro recursos de inconstitucionalidad a la referida ley, pero fueron desoídos por el Estado; hasta que en 2016 se declaró inconstitucional la ley de amnistía, catalogada nacional e internacionalmente como un adefesio jurídico y que encubría la impunidad de ambos bandos enfrentados en la guerra».
«¿Qué queda por hacer? Que las víctimas de ambas partes del conflicto asuman su protagonismo, dice Pedro Martínez, uno de los gestores de la inconstitucionalidad de la Ley de Amnistía de 1993».
Publicado originalmente en Contrapunto, aquí.
Lee también
Muchos muestran lo mejor de sí en medio de la pandemia, excepto el presidente
24 aforismos del tiempo del coronavirus
La corrupción judicial en México es crimen autorizado
