Se la conoce como La Sole, o Soledad, y es la estrella del folklore argentino. Aunque Soledad Pastorutti, su nombre verdadero, también incursiona en el canto latinoamericano —y a veces con un toque pop—, en el cine y la televisión de su país.
Empezó su carrera profesional a los 15 años cuando con el apoyo del folclorista César Isella, La Sole subió al escenario del Festival Folclórico de Cosquín y cautivó a la audiencia con su música y su frescura.
Desde entonces, Soledad no ha parado de cantar y de cosechar éxitos.
“Cuando era chica, no era normal que alguien joven cantara folclore, pero era casi la única música que se escuchaba en casa porque le gustaba mucho a mi papá”, dice Soledad, hoy de 38 años, del otro lado de la línea telefónica. “Yo vivía en una ciudad muy pequeña ubicada cerca de una grande, Rosario, donde el rock y la música extranjera tenían mucha fuerza”.
Su presentación en el Festival Cosquín en 1995 no pasó desapercibida. La disquera Sony Argentina le propuso grabar su primer álbum, “Poncho Al Viento”, del cual se vendieron un millón de copias. Poco después emprende una amplia gira por el país que contribuyó a solidificar su popularidad. Le siguen los discos “La Sole” (1997) y “A Mi Gente” (1998).
La música y presencia de esta joven contribuyen a popularizar el folclore en momentos en que para muchos era un género musical casi en vías de desaparecer.
“En 1999 me invitan a grabar en Miami bajo la producción de Emilio Stefan, fue un primer intento por internacionalizar mi música”, afirma Soledad, nacida en Arequito, un poblado de apenas 6,000 habitantes y donde todavía vive con su esposo y dos hijas. “La disquera pensó que si en Argentina el folclore estaba volviendo a ser popular, lo mismo podía pasar en otros países”.
Dos años después, con la producción de Alejandro Lerner, Soledad incorpora al folclore tradicional de sus canciones, pinceladas de pop que le abren las puertas a un mercado más amplio. “Este cambio fue más bien una adaptación al tiempo presente y logré algo que quería: llegar a audiencias de todas las edades y de diferentes culturas”, explica la cantante.
La música no conoce fronteras y la nueva tecnología permite un mayor intercambio. La música de Soledad fue parte de esta nueva tendencia, además de sus giras y presentaciones internacionales. “Pero me gusta conservar la esencia de nuestro folclore”, afirma La Sole. “Creo que hay una valorización de lo propio frente a la globalización, es importante mantener vivas las raices, la cultura local”.
Además de hablar de su música y de la cultura de su país, Soledad expresa su buen humor. “¿Si me reconocen por la calle? Tengo una ventaja, soy chaparra y como en el escenario me veo grande, paso desapercibida”.
Soledad grabó 16 albums, recibió numerosos premios y distinciones y grabó junto a artistas como Lila Downs, Niña Pastori, Santana, Carlos Vives, Joan Manuel Serrat, Franco De Vita, Juanes, y otros.
Este 8 de mayo inicia la tercera gira de La Sole por Estados Unidos, donde actuará en las ciudades más importantes del país. En California, se presentará el sábado 11 de mayo en San Francisco (Brava Theatre Center) y el domingo 12 en Los Angeles (Alex Theatre).
“Siento que además de encontrarme con muchos argentinos a quienes les gusta nuestra música, también me encontraré con otros latinoamericanos pues tengo un repertorio amplio, no solo argentino”, dice Soledad respecto a su gira. “Estoy muy contenta de ir a cantarles y de poder expresar la diversidad musical de Argentina, no todo es tango aquí. Tengo muchas expectativas de este encuentro con ustedes”!
Su más reciente canción, «La Gringa», un anticipo de su próximo álbum y escrito en colaboración con el colombiano Carlos Vives, tiene un matíz autobiográfico en su letra y un sutil acorde de vallenato, síntesis de La Sole latinoamericana que podremos ver en esta gira.
Aquí están los detalles de la gira.
“La Gringa”, el video:
