Lo que nos dejó el Festival Outside Lands 2015 (FOTOS)
Eduardo Stanley
Ir a un festival de música grande, como Coachella, Bonnaroo , Lollapalooza o Outside Lands, es para un fanático de la música lo mismo que para un niño visitar una fábrica de chocolates.
Y no es para menos: en ellos tenemos numerosos artistas repartidos en varios escenarios que a lo largo del día traen una amplia variedad de estilos musicales. Y aunque el precio por día puede parecer alto —entrada general entre $120 y $140 por persona—, si al menos tenemos tres o cuatro artistas por día que queremos ver, entonces esto resulta en algo así como pagar unos $30-$40 por artista o banda. Nada mal.
Pero un festival de esta clase tiene muchos otros atractivos. Y el resultado es que casi siempre las entradas se agotan —y las reventas aumentan. Setenta mil personas por día son prueba de que quienes organizan estos eventos masivos saben bien lo que están haciendo.
Outside Lands 2015
Este festival se inició en 2008 y tiene lugar cada año en el espectacular Parque Golden Gate de San Francisco. Como otros festivales de su clase, este se realiza durante tres días seguidos, habitualmente en el mes de agosto. Dispone de cuatro escenarios, carpas para DJs, carpa para comedia, un mini-escenario para “eventos culinarios” —si, ¡la comida gourmet está de moda!—, un pequeño mercado, un escenario informal de música “bailable”, troupes que pasean su música “de pueblo” por todos lados, carpas de vinos y de cervezas artesanales, y un largo etcétera.
Outside Lands (http://www.sfoutsidelands.com) se vanagloria de ofrecer comida gourmet, como la que abunda en esta ciudad cosmopolita y agresivamente cautivadora.
Este año, los artistas principales, y que cerraron cada uno de los días de concierto, fueron los muy conocidos Mumford & Sons, The Black Keys y el eterno Elton John.
Pero aparte de estos artistas ya muy populares, Outside Lands nos trajo este año la oportunidad de escuchar y ver a artistas menos conocidos o “emergentes”.
Este es el caso de Natalie Prass (https://www.youtube.com/watch?v=h50Q47W80ao), que con su cálido y muy cuidadoso folk y rock inició el festival el viernes 7 de agosto. Esta nativa de Virginia no necesita de efectos especiales ni una gran banda para cautivar a la audiencia.
Otra banda muy atractiva fue First Aid Kit (https://www.youtube.com/watch?v=DKL4X0PZz7M), un dúo de hermanas suecas que cantan un rock suave con toques de country. Su música gusta tanto como la sonrisa de las jóvenes, que ademas saben de música —una de ellas en teclados y la otra en guitarra.
Pero quien se llevó la simpatía y aplausos de la audiencia fue la californiana Lindsey Stirling (https://www.youtube.com/watch?v=BfiTt920nr8). Ella toca el violín y baila sus propias coreografías. Su música varia: de clásica a “americana”, con toque pop muy liviano. Con la ayuda del vestuario y de su figura —es de contextura pequeña—, Stirling parece volar en el escenario, siempre tocando el violín y bailando, al punto que uno se pregunta si esta joven nunca se cansa.
Una de las sorpresas del festival fue la presencia de la banda inglesa Wolfe Alice (https://www.youtube.com/watch?v=UkghyKKQDss), un agregado de último minuto. El cuarteto, liderado por la joven guitarrista Ellie Rowsell, aportó su rock clásico con algunas mezclas experimentales.
No podía faltar un “clásico” de la música rockera. Así fue como la audiencia disfrutó a Billy Idol (https://www.youtube.com/watch?v=VdphvuyaV_I), quien ya tiene ocho discos y varios premios en su haber. Demasiado conocido como para sorprendernos, pero sin duda sus temas fueron de los más gustados, incluso por las nuevas generaciones!
Otra artista inglesa que demostró que solo una guitarra, bajo y percusión es todo lo que necesita un verdadero artista, fue Laura Marling (https://www.youtube.com/watch?v=j-TMl5oCRjk). Su exquisita voz y su música folk con toques de blues fueron de lo mejor de Outside Lands 2015!
Desafortunadamente, por tercer año consecutivo no hubo artistas latinos en los escenarios de este importante festival.
La audiencia —entre 20 y 30 años— es un reflejo de esto: la mayoría es blanca, seguida por asiáticos. En un tercer término, latinos y, mucho más atrás, negros.
Estos festivales son un lugar de encuentro entre jóvenes, que exhiben una moda al estilo de los sesentas, quizá como vestían sus padres durante la década de la “música y el amor”.
San Francisco es una ciudad muy diversa y la falta de interés de los organizadores del festival de incorporar artistas latinos es posible se deba a una estrategia de mercadeo. Sin embargo, pensamos es equivocada y ojalá se corrija en las próximas ediciones.
Eduardo Stanley se graduó de la Escuela de Cine de la Universidad Nacional de La Plata, Argentina. Realizó estudios de post grado en Semiótica en la Universidad de Bucarest, Rumanía, y trabajó tres años como profesor de Logica y Teoría del Lenguaje en la Universidad Autónoma de Sinaloa, México. En Estados Unidos desarrolló una amplia carrera periodística, incluyendo Univisión, Telemundo, varias publicaciones comunitarias del Valle Central de California, y también como free lance para publicaciones nacionales e internacionales, como La Opinión (Los Angeles) y La Insignia (España). Actualmente es editor del periódico mensual Community Alliance y produce in show radial en español en KFCF 88.1FM, de Fresno.