En una reunión multitudinaria por Zoom con periodistas de los medios étnicos, Ethnic Media Services (EMS) presentó esta semana una sesión informativa de expertos sobre la posibilidad de que la Suprema Corte de Justicia declare ilegal el aborto.
Derecho al aborto en peligro
“Una mayoría conservadora en la Corte Suprema”, inició Sandy Close, directora de EMS, “podría anular la decisión histórica Roe V Wade de 1973 en la que establece que la Constitución de Estados Unidos protege el derecho de las mujeres al aborto.
Nuestros oradores de hoy», agregó, «provienen de la primera línea del acceso y la atención reproductiva y explicarán el contexto y de cómo la posible decisión de la Corte Suprema perjudicará a las mujeres, particularmente mujeres de color que formarán la mayoría de todas las mujeres en EE.UU. para el año 2060”.
Los oradores incluyen a Lisa Matsubara abogada asesora general de Planned Parenthood of California. Jessica Pinckney es la directora ejecutiva de ACCESS Reproductive Justice, una organización de justicia reproductiva. Y Jodi Hicks es la gerente general y presidenta de Planned Parenthood de California.El evento fue moderado por la periodista y escritora Pilar Marrero.
Lisa Matsubara
Si la Corte Suprema llega a anular la decisión Roe V Wade, dijo Matsubara, de manera inmediata al menos 26 estados prohibirán el aborto y 36 millones de mujeres perderán acceso al aborto.
¿Cómo llegamos a esto y por qué hay un peligro concreto de que este sea el desenlace?
En los últimos cinco años la composición de la Suprema Corte cambió dramáticamente. Los tres jueces que nombró Trump son ferozmente opuestos al derecho al aborto. Durante los cuatro años de Trump, el Senado aprobó 231 jueces, casi todos blancos, varones y extremistas anti aborto. De hecho, la prueba de fuego que llevó a la nominación de cada uno de ellos fue su oposición a abotto. Además, son jóvenes y estarán en el puesto por décadas.
El principal problema ya tiene lugar en el estado de Texas, en donde la ley SB8 que de hecho hace imposible el aborto, fue avalada momentáneamente por la Corte Suprema.
En Texas la gente ya perdió las protecciones al aborto, porque esa ley prohibe el aborto con la detección del latido del corazón del feto, que ocurre alrededor de la sexta semana de embarazo.
La ley invita a individuos particulares a demandar a cualquiera que provea aborto, que le ayude o lo proteja o intente hacerlo. Permite que los demandantes particulares colecten 10,000 dólares por cada caso, además de los costos de abogados. Pero prohibe a los demandados, si es que ganan el juicio, colectar esos costos.
Varias entidades presentaron una apelación ante la Suprema Corte, pero esta rechazó detener la puesta en marcha de la ley, y ésta ya está en efecto desde hace 163 días.
Quiere decir que en Texas ya no hay servicios de aborto. El 83% de los aboretos ocurrían después de esas seis semanas.
El departamento de Justicia presentó una demanda, diciendo que ciudadanos privados no pueden privar a una mujer de sus derechos constitucionales. Esto fue rechazado.
Otros estados: Florida, Arkansas, Ohio, Arizona, Missouri, Alabama, están en distintas etapas de establecer leyes similares, y legisladores en Indiana, Mississippi, Dakota del Norte, Dakota del Sur y West Virginia anunciaron que presentarán propuestas de ley en ese sentido en poco tiempo.
La Corte Suprema decidirá el caso que es un desafío directo para el derecho al aborto. Pare ayudar a comprender cuál es la situación actual: veinte años después de Roe V Wade, en Planned Parenthood V Casey la corte reafirmó el derecho constitucional al aborto.
La corte estableció el estándar de que un estado puede regular el derecho al aborto previo a la probabilidad del embarazo siempre que no incida en el derecho fundamental de una mujer a abortar. Este es el patrón por el cual se ha manejado el tema desde entonces.
Entonces, el caso que está ante la corte hoy es Dobbs v Jackson Women ‘s Health Organization.
Es un desafío presentado por el único proveedor de abortos de Mississippi a la prohibición de abortos de Mississippi de 2018 después de las 20 semanas de embarazo. Esta ley fue impugnada de inmediato y fue a la corte de primera instancia en Mississippi, así como a un Tribunal de Apelaciones del quinto circuito. Ambos aplicaron los casi 50 años de precedente e invalidaron la ley antiaborto, por lo tanto, la ley actualmente está bloqueada y no tiene efecto.
Sin embargo, la Corte Suprema concedió la revisión y dijo específicamente que iba a considerar si todas las limitaciones al aborto previa la viabilidad son inconstitucionales. Esto es muy preocupante porque significa que está en consideración el derecho de una embarazada a elegir interrumpir o no un embarazo.
Los argumentos en este caso tuvieron lugar el 1 de diciembre y se espera una decisión antes de junio.
Los estados campo de batalla
Los estados son hoy el campo de batalla en el acceso al aborto.
En 2021, se han legislado 106 restricciones. En lo que va de 2022, ya son 180 en 37 estados. Y eso que el 80% de los estadounidenses apoya el aborto seguro y legal.
Esto llevará a que más de un millón de mujeres buscará el aborto en California, un crecimiento de 3,000%.
En los estados donde la práctica es legal, donde antes la espera era de tres días, ahora es de tres semanas, no solo para visitantes sino también para los locales.
La respuesta de California
En septiembre pasado se reunieron en California 40 organizaciones formando el Future of Abortion Council, y publicaron 45 recomendaciones. Se puede ver en https://www.cafabcouncil.org/
Ahora, Roe V Wade ha sido la ley establecida por 50 años, no quiere decir que todos puedan por la enmienda Hyde (una disposición legislativa que prohíbe el uso de fondos federales para pagar el aborto, excepto para salvar la vida de la mujer, o si el embarazo surge de incesto o violación). Obviamente, la enmienda impone restricciones y dificultades que recaen mayormente sobre personas de bajos ingresos y comunidades de color.
Por otra parte, si la Suprema Corte rechaza Roe como inconstitucional, eso no quiere decir que en todos los estados se prohiba.
Cada estado decide cuales son las restricciones y si quieren pueden dejarlo legal en su estado.
Jessica Pinckney
Somos un llamado Abortion Fund, un fondo de aborto. Existen unos 80 en todo el país. Entre otras cosas, protegemos a la gente que va a las clínicas de aborto. Nos ocupamos de proveer información y de construir un sistema de comunicación para la gente que busca servicios reproductivos. Mantenemos una línea telefónica abierta de lunes a viernes de 10 a 4 de la tarde para quien lo necesite.
Generalmente atendemos a gente sin seguro médico o con seguro insuficiente. En California el programa de Medicaid – aquí lo llamamos MediCal – cubre los gastos de aborto y les ayudamos a conseguir esa ayuda.
Además proveemos transporte a la clínica, ayudamos a pagar alojamiento si es necesario, comida que muchas veces falta. La mitad de las mujeres que buscan abortar ya tienen otros hijos y les ayudamos a conseguir cuidado para ellos en su casa mientras viajan para atenderse en las clínicas.
Tenemos voluntarios entrenados en el tema de la justicia reproductiva, que – eso era antes del COVID – abrían sus casas y ayudan a la gente.
Nuestro sitio es: https://accessrj.org/ .
Hacemos reservas de hoteles, ordenamos Uber para ellos, o les damos el costo de la gasolina.
La mayoría de los que llaman son jóvenes de alrededor de 20 años sin ingresos o con pocos ingresos. Son afroamericanos, indígenas, personas de color. Muchos ya tienen MediCal.
En 2021 ayudamos a 500 personas para acceder al aborto.
Una tercera parte de ellos eran de fuera del estado, de 18 estados. Sabemos que si cae Roe v Wade en junio el número crecerá, porque
California será un refugio seguro.
Jodi Hicks
Tenemos casos similares a estos, con los que ayudamos a nuestros colegas en Texas, que están bajo la nueva ley. Muchos de ellos son efectivamente jóvenes que nunca viajaron fuera del estado.
El 60% de los que vienen a Planned Parenthood son personas de color, 70% de ellos tienen menos de 30 años y un porcentaje similar son pobres.
En el último año atendimos a 7,000 pacientes de afuera del estado.
Tenemos un compromiso de ayudar a todos los que cruzan nuestras puertas.
Si la Corte Suprema anula Roe (la legalidad del aborto), esto afectará a 36 millones de mujeres de edad reproductiva.
De ellas, 5 millones son afroamericanas, 5,7 millones latinas, y 1.1 millones, asiáticas.
Si se cancela Roe, esto afectará a por lo menos todos los estados que no ofrecen servicios de aborto, que no proveen fondos propios.
Incluso las píldoras que inducen el aborto son ilegales, y en Texas, por ejemplo, proveerlas o recetarlas conlleva penas de cárcel y una multa de 10,000 dólares. .
Solo 15 estados proveen ayudar para el aborto, incluyendo California.
Negar el aborto causa que las mujeres sigan en contacto con un impregnador violento. Lleva a que tengan que criar a un niño ellas solas. Tiene un impacto financiero negativo sobre ellas y a veces, problemas de salud graves causados por el parto.
El acceso al aborto es de por sí difícil y no es una realidad. Hay mucho trabajo para hacer.
Pero la decisión de la Suprema corte puede cerrar de una vez el camino al aborto.
¿Y qué va a pasar con la próxima generación? Las mujeres van a ser más marginalizadas en comunidades ya marginalizadas de por sí. En Texas un vecino puede denunciar a otro… y otros estados quieren criminalizar a las mujeres.