El Festival Tamejavi en el Valle Central de California, esta semana, se enfoca en el papel de la cultura como exponente de los cambios en las comunidades migrantes.
“Cada máscara es una pieza única, no la hacemos en serie», dice Alejandro Vera Guzmán, maestro artesano de Santiago Juxtlahuaca, Oaxaca, quien visita el Valle Central de California para participar del Festival Tamejavi, a realizarse el sábado 19 de septiembre. “Cada vez más la gente sale a bailar con mascaras originales».
Según Vera Guzmán, durante mucho tiempo los bailes tradicionales en Oaxaca se celebraban con máscaras realizadas comercialmente, o tapándose la cara con paliacates o pañuelos.
Pero ahora hay una revaloración del arte tradicional. “No queremos que esto se vea como arte menor, nos sentimos muy orgullosos de lo que hacemos y le dedicamos mucho tiempo».
Las máscaras tienen un sentido muy especial en los bailes oaxaqueños, como el de “los Rubios». Representan personajes de la historia que el baile recrea, como El Caporal, Rubio, El Pachequito y María Lencha.
El baile es una relación “viva” de los danzantes y los músicos. Los danzantes marcan el ritmo, le “avisan” a los músicos cuándo cambiar de ritmo. Al mismo tiempo, narran la historia de los arrieros que llevaban ganado desde Oaxaca hasta Veracrúz o Tamaulipas… caminando! El viaje podia tomar tres meses o más.
«Voy a los pueblos de Oaxaca a ver los bailes y me emociona cuando veo las máscaras —algunas hechas por mí— por lo que representan, por el esfuerzo del artista», dice Vera Guzmán, quien también es violinista.
Lo acompaña otro artista, Angel Ramos Rodríguez, intérprete de guitarra y jarana. Ambos grabaron el disco “Ay mis tiempos».
“Fue una experiencia muy intensa, la música de los Rubios está ahí, se escuchan hasta los sonidos de las espuelas», dice Ramos Rodríguez. “No usamos efectos ni ediciones, es una grabación muy natural».
Para muchos oaxaqueños del área, la presencia de estos dos artistas generó espectativas. Miles de oaxaqueños viven en el Valle Central.
Vera Guzmán y Ramos Rodríguez pondrán la música a la Danza de los Rubios durante Tamejavi. El baile estará a cargo del grupo Se’e Savi (Hijos de la Lluvia), de Madera.
Esta sera la 5a. edición del Festival Tamejavi, un esfuerzo iniciado en 2002 y que se repite cada dos años. La idea es algo más que hacer un festival multicultural. El concepto es que el festival sea el resultado de las relaciones e intercambio cultural de comunidades o grupos de diferentes étnias —principalmente inmigrantes.
Así por ejemplo, durante meses se realizan reuniones y diálogos sobre aspectos culturales, sociales e históricos de las comunidades. Este conocimeinto incluye la cocina, bailes y música.
Tamejavi es una palabra creada de tres idiomas: TAj laj Tshav Puam… (Hmong) MErcado… (Spanish) nunJAVI… (Mixteco).
O sea, Mercado, lugar de encuentro e intercambios.
Tamejavi quiere ser un espacio para que las comunidades presenten, expongan su cultura. Pero también para que conozcan otras y dialoguen sobre la importancia de la cultura como elemento de cambio.
Este año, además de las comunidades indígenas de México (Mixtecos, Zapotecos y Triquis), participaran Hmong, Persas, Filipinos, Nativo Americanos y otras.
La conservación de la cultura es uno de los elementos que interesa a estas comunidas.
“Nacemos bailando y con música, así que esto no se perderá», dice Vera Guzmán. Sin embargo,siempre se busca la superación. “Si no confiamos en nosotros, en lo que hacemos, nadie mas lo hará».