En colaboración con la Agencia de Financiamiento de Vivienda de California (CALHFA) y Medios Afroamericanos de California, Ethnic Media Services (EMS) organizó la semana pasada una sesión informativa para reporteros y editores de medios étnicos sobre la crisis de vivienda en el estado.
COVID-19 y la interrupción económica relacionada han hecho que la vivienda, de por sí en una difícil situación para millones de familias de California, sea aún más difícil. Muchos californianos ya perdieron sus hogares, y estas pérdidas han afectado de manera desproporcionada a los trabajadores con salarios bajos que a menudo son afroamericanos, indígenas y personas de color.
El asesoramiento de vivienda gratuito está disponible en todo el estado para inquilinos y propietarios que están preocupados por perder sus casas.
“Nuestro foco hoy”, dijo Sandy Close, directora de EMS, al abrir el evento, “son los millones de pequeños propietarios, de quienes compraron viviendas de alquiler por primera vez, de los inquilinos, que enfrentan la amenaza de juicio hipotecario (foreclosure), del desalojo, de no poder jamás comprar una casa en el futuro. Especialmente ahora, cuando la moratoria de los desalojos llega a su fin, así como la ayuda gubernamental por la pandemia”.
“Tenemos que diseminar la noción de que hay ayuda por parte de personas reales, más allá de solicitudes en línea”.
Participaron consejeros y expertos que pueden informar acerca de los recursos gratuitos disponibles, incluyendo a un propietario incapaz de hacer pagos a su hipoteca porque sus inquilinos no le pagan, y una inquilina incapaz de hacer esos pagos.
Eric Johnson
Para dar una idea de la magnitud del problema, Johnson, encargado de contacto con la prensa por parte de la CALHFA, aclaró que “existen 721,000 familias que en conjunto deben más de 3,300 millones de dólares en alquileres atrasados. Y el problema es que los propietarios de unidades de alquiler son muchas veces a su vez familias que lograron adquirir dos unidades o tres y viven en una de ellas, o a veces han construido una unidad de alquiler en su garage y que al no percibir los alquileres a su vez no pueden hacer los pagos de la hipoteca”.
“El segundo elemento para recordar”, agregó el funcionario, “es que entre aquellos para quienes el alquiler constituye la mitad o más de sus ingresos, la enorme mayoría no hablan inglés”, es decir, son inmigrantes, el 36% de ellos latinos.
En consecuencia, la mayor parte de quienes necesitan más ayuda no pueden recibirla porque no tienen acceso a la información en inglés”.
“Tenemos casi 74 millones de dólares disponibles para pagar los costos de asesoramiento para dar consejería a las personas que lo necesitan. Hay fuera de la organización muchísimos asesores que piden dinero por su ayuda. Eso es malo. Hay mucho fraude, tienen que ser consejeros aprobados por la Secretaría federal de Vivienda (HUD) y en nuestro caso, es gratis.
Si te piden dinero por asesoramiento, corre tan rápido como puedas”, explicó.
“Espero que podamos conseguir más fondos, porque hay muchas personas que están realmente desesperadas”.
“Uno puede llamar por teléfono, y hay una lista de 76 centros de asesoramiento gratuito, con 217 asesores cualificados. Es muy importante que el interesado pueda hablar con una persona y no con una grabación o que tenga que esperar largo tiempo hasta poder recibir una respuesta.
Hay varias maneras de comunicarse.Hablarán con ustedes con inquilinos y pequeños propietarios, propietarios de viviendas que se enfrentan a una ejecución hipotecaria.
Este año, hemos ayudado a 23,000 personas en el programa y aún tenemos fondos para continuar esta ayuda para ayudar a muchos más.
Pero el 31 de marzo vence el Programa de asistencia de alquiler de emergencia, y el plazo para pedir ayuda por parte de propietarios e inquilinos.
Apliquen lo más rápido que puedan. Pueden hacerlo en persona o en línea y los consejeros les pueden ayudar con la solicitud en su propio idioma. Se puede hacer por Zoom, personalmente, o por teléfono. Una vez que sus datos estén en el sistema antes del 31 de marzo, están en una buena situación.
Incluso podemos hablar con personas interesadas en comprar su primera casa.
A la pregunta de en cuánto inciden los altos precios de los alquileres, las propiedades y la vida en general, el funcionario dijo que “no hay duda de que los salarios no han aumentado al mismo ritmo que los costos generales de vivienda en California”.
Interrogado al respecto, Johnson dijo que la fecha límite ya había sido postergada, pero no tiene indicios de que lo será nuevamente.
Linda Jackson
A continuación, Linda Jackson, director ejecutiva del Centro de Recursos del Inland Empire, describió los servicios que prestan a los interesados en su área.
También proporcionó el sitio de internet donde se puede iniciar el proceso:
El gobernador, anunció Jackson, está por liberar un presupuesto de millones de dólares para cubrir todos los gastos para millones de interesados en California. Pero la ayuda no es para el inquilino, sino para el dueño de la unidad, que es quien no ha estado recibiendo los pagos de alquiler. El dinero nunca irá al inquilino.
Nuestra tarea es ayudar a la gente de la comunidad. Hay muchos casos donde no hablan inglés o no saben cómo hacer la aplicación en línea. Pero más importante es presentar un paquete completo, con toda la información necesaria, que es necesario para que se apruebe su solicitud. De modo que proporcionamos la información de todo lo que estará bajo consideración en la aplicación.
Existe un programa de subsidios para dueños de unidades de alquiler que ya están bien atrasados en sus pagos de la hipoteca. Pueden pedir hasta 80,000 dólares y no se necesita demasiada documentación, algo que no existía anteriormente.
Para todo eso es necesario que la intermediación venga a través de un consejero de vivienda certificado, que sabe todas las preguntas y las respuestas.
Ahora, esta no es una crisis de hipotecas. Es una crisis de deudas. Hace 12 años la crisis era de hipotecas Y los subsidios de hoy pueden ayudarle a cancelar todos sus pagos atrasados».
