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El género biológico de Dios… y el gramatical

género de Dios

Ascensión (1474-1479). Bartolomé Bermejo. Museo Nacional de Arte de Catalunya.

La iglesia anglicana, confesión cristiana establecida en Inglaterra en el siglo dieciséis, se plantea revisar la forma de referirse a Dios por medio de pronombres. Se quiere prescindir de “Él” o “Ella” (en inglés) para evitar asociarlo con algo humano; y en particular, masculino. Los reporteros de la noticia en español dudan entre decantarse por un “Ello”, o recurrir a un pronombre de diseño: “Elle”. No se piense que es sencillo quitarle la barba al Señor

No podemos olvidar que nos educaron con aquello de estar hechos a Su imagen y semejanza. Podemos ver que el cambio ayudaría a quitarnos de encima la complicación de interpretar por qué unos humanos tienen barba y otros –otras– no. Así dejaríamos de plantearnos el misterio de que unos no den a luz y otros –otras– sí.

La propuesta para el inglés desde la óptica del español

Para comenzar, sabemos que la lengua anglosajona tiene en su gramática un pronombre asexuado “It”. Hay otros que incluso proponen un histórico singular “They” (Christy Thornton). En español, a nuestro pesar, la búsqueda de formas asexuadas equivalentes da resultado negativo.
Nuestra lengua carece de “pronombres para no humanos”. Si decimos “ella es bonita”, “ella” no puede ser una “casa”. Si alguien piensa en “Ello” como solución, que lo olvide: no se aplica a Nombres, y “Elle” sería, si lo inventamos, para personas no binarias, pero siempre humanas.

La iglesia anglicana considera que Dios tiene género neutro

Se podría alegar en apoyo de la innovación propuesta por la iglesia anglicana que, por carecer Dios de biología humana, sería inadecuado asignársela. Su humanización, además, tendría el efecto desconcertante de que pudiera existir un Dios “trans”, uno LGTBI, y así sucesivamente. ¿Podrían llamar las feministas “Ella” a Dios? ¿Cómo negárselo?

El habla de nuestra mente

Ante tales dificultades, lo más aconsejable es intentar resolver el problema sin inventar nuevos pronombres. Bastaría con demostrar que el actual “Él” divino –el de uso general– y el “él” masculino y humano conviven sin interferirse mutuamente. Porque a veces las apariencias engañan, pensemos en el artículo “el” de “el agua”. Aunque coincide con el “el” de “el libro” nadie va a afirmar que es de género masculino, porque no decimos “el agua claro”, sino “clara”.

Imagen de los siete arcángeles: Miguel(al centro), Gabriel, Rafael, Uriel, Raguel, Zerachiel y Remiell.

La situación es extensible a “arcángeles”, “ángeles” y otras criaturas celestiales, todas asexuadas.  ¿De qué género serían entonces Gabriel, Miguel, Uriel, etc.? Un diccionario etimológico nos lo aclara: En hebreo el segmento “-El” de estos nombres (Gabri-El, Migu-El, etc.) significa… “Dios”. Lo encontramos hasta en “Isra-El”. Nuestra mente es la que los ha hecho engañosamente masculinos.
La feliz coincidencia del español “Él” con el nombre bíblico “El” para “Dios” nos motiva a perseverar con el uso actual. Aprendamos a no confundir lengua con mente.

Autor

  • Luis Silva-Villar

    Luis Silva-Villar es educador, lingüista, periodista de la lengua y musicólogo. Obtuvo su PhD en la Universidad de California de Los Ángeles (UCLA). Es asimismo licenciado en Lingüística Hispánica por la Universidad Complutense de Madrid (España) y Profesor de Música por el Conservatorio Superior de Música de Madrid. Ha impartido clases en UCLA, UCSB y CMU. Actualmente es profesor emérito del Departamento de Lengua, Literatura y Comunicación de Masas de este último centro. Especializado en lengua y lingüística, e Historia y Cultura de España y Latinoamérica, su interés se centra en el español en Estados Unidos. Como periodista de la lengua ha publicado en España, en las revistas Ritmo y Folk, y en diferentes medios de Estados Unidos: La Opinión (LA), Diario de Nueva York, La Raza (IL), Hispanic LA, y Entérate Latino (CO), entre otros. Posee una docena de libros en el mercado, de los que destacan: Hablaciones (2009), Hablacadabla (2011) y El fondo y el forro del idioma (2020). Es el autor de la entrada enciclopédica “Periodismo de la lengua en la prensa escrita” de la Enciclopedia de lingüística hispánica, 2016. Luis Silva-Villar is an educator, linguist, language journalist and musicologist. He earned his PhD from UCLA (CA) and his licensure in Hispanic language and Literature from the Universidad Complutense de Madrid (Spain). He completed his studies in music from the Royal School of Music of Madrid (Spain). He was a professor at UCLA, UCSB and CMU, from where he is an emeritus professor of the Department of Languages, Literatures and Mass Communication. He is specialized in language and linguistics, Spanish in the US, and History and Culture of Spain and Latin America. As a language journalist he has worked for the following publications: Ritmo and Folk in Spain, and a variety of newspapers in the US: La Opinión (LA), Diario de Nueva York, La Raza (IL), Hispanic LA, and Entérate Latino (CO), just to mention a few. He has written a dozen books, among them we would highlight: Hablaciones (2009), Hablacadabla (2011) y El fondo y el forro del idioma (2020). He is the autor of the encyclopedic entry “Periodismo de la lengua en la prensa escrita” (Enciclopedia de lingüística hispánica, 2016).

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