Mi familia en México hizo de la preparación y comercialización de las delicias, nuestra manera de vivir. La creación de cada platillo era para nosotros arte. Un arte que nos alimentó por muchos años.
La rutina de la cocina económica
Las comidas de una chilanga ordinaria como yo, pueden encontrarse a la vuelta de la esquina: sopa, arroz, el plato fuerte o guisado, agua de frutas, tortillas y postre. Se le llama comida corrida. Su precio es módico: de cuatro a seis dolares.
Desde que yo tenia tres años, las rutinas del dia eran estresantes y se repetían desde 1973 cuando mi mamá inicio su cocina económica o restaurancito. El trabajo comenzaba muy temprano. Mi abuela, que vendia verduras y chiles secos, dejaba por unos momentos su puesto e iba al de mi mamá a calentar cuatro ollas grandes de agua para que estén hirviendo cuando mi mamá llegara.
Era un avance inmenso tenerlas ya listas, ahí ponia los frijoles, cocinaba la carne de res, sumergia el pollo crudo para esterilizarlo y luego lavarlo con agua fria, o hervía papas.
Despues de decidir el menú del día, se picaban las verduras y se comenzaba a moler en la licuadora las salsas y mezclas con que se prepararian los guisados y las frutas con azúcar para las aguas frescas.
Tenia que haber tres platos fuertes de pollo, carne de res o de puerco con difententes salsas. El arroz, podía ser blanco con tomates, rojo con jitomates, o verde con chile morron verde. Siempre vistoso, para que los clientes disfrutaran la vista.
Luego, la sopa caliente: podian ser fideos caldositos y apapachadores. Además de los tres guisados definidos que cambiaban diariamente, el caldo de pollo, verduras o bistec se preparaban al momento, al gusto del cliente.
Las opciones del menú
Las opciones eran: encebollado, a la mexicana con jitomate, chile y cebolla, y por último asado con sal o sin sal. En estas imágenes de Paul Alvarez, tenemos en el menu del día para comenzar el festín de modo sano, una sopita de verduras de las de temporada.
Acelgas, coliflor, col o repollo, zanahorias, y chícharos hervidos en una mezcla de ajo, cebolla y jitomate, y una ramita de cilantro para dar más sabor.
El arroz blanco se cocinó con una mezcla de agua, ajo, cebolla, y tomates verdes. Se adorna con hojas de perejil y se sirve con rebanaditas de jitomate fresco. Por ultimo, olvidándonos un poco de la dieta, tacos de carnitas, que es carne de puerco cocinada lentamente hasta que se fria muy bien.
Se le agrega jugo de naranja, manteca de puerco, y ajo si se desea y sal. Se sirve con salsa roja de jitomates, ajo y chiles secos o con salsa verde, tomates verdes, ajo, chiles verdes y cilantro.
Decía mi mamá que de la vista nace el amor, que todo se vea en su punto y atractivo en colores y texturas. Y para demostrarlo, aquí está su receta de sopa de verduras.
Sopa de verdura
Para elaborar 4 porciones para cuatro comensales vamos a necesitar estas cantidades de cada verdura de temporada.
Ingredientes
1/2 libra de acelgas
1/2 libra de coliflor
1 pieza mediana de col o repollo
4 piezas de zanahorias
1/2 libra de chícharos pelados
1/2 cabeza de ajo
1 1/2 cebolla blanca
6 piezas de jitomate (tomate rojo)
1/2 manojo de cilantro
4 tazas de caldo de pollo, o de agua
2 pizcas de comino
3 pizcas de pimienta
1/2 cucharada de sal de mar
4 cucharadas de aceite de olivo o de semilla de uva
Preparacion
Se pica la verdura en pedazos medianos, la zanahoria en rodajas y el cilantro en piezas de un centimetro de largo, se pelan los ajos, y se corta la cebolla y el jitomate en tiras medianas.
Se pone a moler el jitomate, con tres dientes de ajo, media cebolla y 2 tazas de agua, se licúa hasta que la cascarita desaparezca.
[bctt tweet=»Del amor de una madre; de años de escasez y sacrificio, se deriva en la sección Cocina mexicana y más… de Hispanic L.A., una receta de sopa de verdura » via=»no»]
Se pone en una cazuela mediana a calentar el aceite, se agrega una cebolla picada en tiras, y se frie hasta que la cebolla se empequeñezca, y tome un color marrón claro.
Se agrega el jitomate molido, y se deja hervir hasta que el aceite con que se frio la cebolla salga a flote en las orillas de la cazuela. Logrado esto, se agrega la verdura picada, y se deja sazonar por cinco minutos.
Se agrega el caldo o agua, y luego los cominos, pimienta, y por último el cilantro picado y la sal al gusto. Se deja hervir otros tres minutos.
Lee también
¿Que ese vino sabe a qué? (con lista de variedades)
Los Angeles: cada uno y la sopa que lo nombra
TINTA ROJA: La confianza es un plato que no se sirve frío