La semana pasada hacíamos mención de Texas, un estado diferente a todos los demás en que una vez fue un país independiente y que profesa toda clase de posiciones extremistas. Son líderes en la senda del odio. Parecería que se dedican a buscar más y más rendijas por las que pueden oprimir a los inmigrantes, aunque en el camino reclamen atribuciones federales sobre el tema migratoria, atribuciones que no tienen.
Se puede entender el temor generalizado de la gente, aunque no responde a ningún hecho real, contra los inmigrantes, porque son más de 5.4 millones, el 16.5% del total de su población.
Pero hay un estado en donde ni viven mucho inmigrantes indocumentados, ni tiene salida la frontera con México. Y sin embargo, también en allí se ha generalizado una racha de legislación de odio contra los inmigrantes en general y latinos en particular.
Iowa.
Bajo el gobierno de Kim Reynolds se repiten, se calcan las disposiciones draconianas contra los inmigrantes. Desde el recorte de ayuda a las familias hasta una nueva ley que – con el modelo de Texas en la mente – habilita a las autoridades estatales tomar las atribuciones de agencias de inmigración federales, con una total indiferencia a la verdad, a los derechos humanos, y a las comunidades migrantes que a través de los años han encontrado en Iowa un hogar para sus famlias.
Pero mirando el cuadro de la situación demográfica, uno se pregunta si todo el escándalo detrás de estas leyes tiene justificación. En efecto, la población migrante es solo de 170,118, menos del 5% del total, de los cuales solo 35,544 son considerados indocumentados.
Efectivamente la semana pasada la gobernadora firmó esta ley dracónica entre fanfarria y demostraciones de júbilo. En la ley SF2340 las autoridades locales reciben el derecho para arrestar a indocumentados – a quienes fueron previamente deportados o se demuestra que entraron ilegalmente – y a los tribunales estatales ordenar su deportación. Igual que en Texas con la SB 4, solo que Iowa no tiene los inmigrantes. Un tribunal ordenó suspender la aplicación de la ley hasta un dictamen de la Suprema Corte.
En esta carrera para ver quién es más extremista, duro con la gente que emigra y desatiende la autoridad del gobierno federal la gobernadora imita a Greg Abbott, su par de Texas. Aquí está el texto de la ley SF2340.
Será puesta en efecto recién en julio, dando tiempo para defensores de los inmigrantes para demandar y solicitar que se declare anticonstitucional.
Con razón, la comunidad latina de Iowa está alarmada por su futuro. «No podemos permitir que se apruebe esta ley inconsciente e inconstitucional porque sólo generará odio aquí en Iowa. Dejemos en claro que los inmigrantes desempeñan un papel crucial en la economía de este estado», dijo Joe Henry de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (LULAC).
La decisión de Iowa de legislar una copia de la ley texana está calculada como un apoyo tácito a aquel estado, así como el deseo de la gobernadora de lucirse ante la base de MAGA. Vamos a ver qué dicen los tribunales.
Lo que se viene en Iowa será posiblemente una repetición de lo sucedido hace seis años, cuando escuelas y organizaciones comunitarias se organizaron para proteger a los niños inmigrantes.
Este artículo fue apoyado en su totalidad, o en parte, por fondos proporcionados por el Estado de California y administrados por la Biblioteca del Estado de California.