El 24 de enero de 2010, después de seis meses de prisión, el interventor de pandillas, el ‘peacemaker’ y fundador de Homies Unidos en Los Angeles Alex Sánchez fue puesto en libertad con una fianza de dos millones de dólares.
Su juicio, junto con el de otros 23 acusados en un caso federal de asociación ilícita y conspiración para el asesinato de un pandillero en su nativa El Salvador en 2006, iniciará en octubre de este año.
Dos veces consecutivas, el juez Manuel Real que preside el caso se negó a poner a Sánchez en libertad condicional, aceptando alegatos hechos públicos por parte del fiscal federal, así como la FBI y la policía de Los Angeles de que si era puesto en libertad, Alex Sánchez huiría a El Salvador, en donde en realidad penden sobre él amenazas concretas de tortura y muerte por parte de los pandilleros que él abandonó en 1994.
Aparentemente, fueron testimonios secretos de las agencias del órden las que impresionaron al magistrado suficientemente como para liberar al acusado y permitirle prepararse para su juicio.
Las acusaciones se basan en una conversación telefónica interceptada con un operativo pandilleril, uno de muchos con los que Sánchez conversa en su labor de lograr treguas entre distintos grupos y entendimiento entre latinos y negros en los barrios de Los Angeles. La decisión judicial depende de la interpretación de los términos usados en la conversación, a los que la fiscalía atribuye una órden de ejecución.
Tuvo que mediar una decisión de un tribunal de apelaciones que ordenó a Real reconsiderar sus decisiones para que finalmente y con una fianza gigantesca, Sánchez pudiese volver a su casa.
La liberación de Sánchez se debe en gran medida a la labor de grupos comunitarios, activistas individuales, interventores de pandillas, el ex senador estatal Tom Hayden, el padre Gregory Boyle, artistas, periodistas, políticos hispanos y, en general hombres y mujeres de la calle que conocen a Sánchez y apreciaron su labor contra las pandillas.
Inmediatamente después del shock inicial y una vez recuperados del asombro de ver a Alex Sánchez bajo tan graves acusaciones, inició una lucha para asegurarle un juicio justo – ‘Fair trial to Alex Sanchez’.
Se formaron comités, un sitio de internet, WeAreAlex.org, y reuniones de organizaciones de bases.
El foro de internet ‘Cuéntame’ publicó en el par de meses desde su creación cuatro vídeos difundidos por Facebook en apoyo de Sánchez. Y en WeAreAlex, se publicó un video con breves entrevistas a decenas de los participantes del primer evento comunitario en su apoyo, con participación hasta de sus hijos.
Estos son, como testimonio, dos de los videos publicados en internet sobre la saga de Alex Sánchez:
