¿Fidel, salvador del mundo?

Fidel Castro, quien en 1962 propuso al líder soviético Nikita Khruschev que la Unión Soviética lanzara un primer golpe nuclear contra Estados Unidos que pudo acabar con la civilización, ahora en su nefasto regreso a la palestra pública –para amedrentar al sector reformista dentro del estalinismo cubano– se presenta como salvador del mundo y habla de un ataque de Estados Unidos a Irán que desatará una guerra atómica.

Aunque nadie toma en serio las profecías de “Nostracastrus”, como le llaman en la Internet, es importante precisar que esta versión moderna y barbuda de Casandra lo que realmente pretende es aliviar las presiones diplomáticas contra Irán, su aliado, para precisamente facilitarle la construcción de la bomba atómica, para un país que tiene entre sus objetivos lograr que “Israel sea borrado de la faz de la Tierra”, según proclama su presidente, Mahmaoud Ahmadinejad.

El octogenario comandante, que recuperado de su gangrena intestinal –aunque golpeado por una demencia vascular que lo hace caer en baches mentales– ha dejado sin empleo al canciller cubano Bruno Rodríguez, como maestro de la manipulación nuevamente presenta lo negro como blanco.

En primer lugar, un ataque contra Irán nunca sería nuclear y, por tanto, la respuesta tampoco sería nuclear, por dos razones: 1) porque el bombardeo tendría lugar antes de que Irán tenga armas nucleares y 2) porque a un ataque con armas convencionales ninguna potencia nuclear que saliese en defensa del régimen fundamentalista de los ayatolas –no me imagino cuál– respondería con un ataque atómico contra Israel o EEUU. Incluyo aquí a Pakistán, la única nación musulmana que cuenta con bombas atómicas.

¿De dónde saca entonces Castro que un ataque a Irán será el Apocalipsis? ¿Es que acaso él sabe que Irán tiene armas nucleares que ya puede usar?

Es Teherán quien acerca el peligro atómico al no querer suspender su propio programa de enriquecimiento de uranio. Y digo “propio” porque en estos días el gobierno iraní pone  en marcha la planta nuclear de Bushehr, construida por la empresa alemana Siemens pero cuyo uranio enriquecido es enviado desde Rusia, país que también se encargará de recoger luego los desechos radiactivos de esa instalación que producirá electricidad. O sea, con ese uranio ruso Irán no puede fabricar armas nucleares.

Son cómplices de Irán los presidentes Lula da Silva, Hugo Chávez, Evo Morales y otros que junto a Cuba defienden el “derecho de Irán” a poseer armas nucleares. En su hipocresía –por motivos ideológicos—pretenden ignorar que Irán se ha quitado a sí mismo el derecho a tener armas nucleares con su obstinada insistencia en querer borrar del mapa a otro estado soberano. Ninguna de las actuales potencias nucleares tiene semejante meta. Esa es la diferencia.

Tampoco se le puede dar a Irán el beneficio de la duda, porque la falta de transparencia y la práctica de mentir y cometer fraudes electorales colosales son razones suficientes para sospechar que con respecto al uranio enriquecido el régimen iraní también puede que mienta cuando alega objetivos pacíficos. No es posible correr el riesgo de un cataclismo nuclear por darle el beneficio de la duda a un régimen que no goza de credibilidad.

La nula efectividad de las sanciones económicas del Consejo de Seguridad de la ONU contra Irán para que suspenda su programa nuclear y las débiles –e inútiles– presiones de “casi” aliados como Rusia y China, van cerrando la posibilidad de una opción negociada y conformando un consenso mundial de que tarde o temprano no habrá más remedio que bombardear las instalaciones atómicas iraníes.

Pero según una nota de “El País”, de Madrid, publicada el 21 de agosto, la semana pasada Washington informó al gobierno de Israel que faltan al menos 12 meses para que Teherán pueda utilizar su propio uranio enriquecido en la construcción de su primera bomba atómica, con lo cual aparentemente EEUU convenció a la cúpula israelí de que no debe por ahora bombardear las instalaciones nucleares iraníes.

Infierno atómico

En cuanto a un posible conflicto atómico, lo irónico es que no hay ningún dirigente político en el globo terráqueo que tenga menos autoridad moral para fungir como salvador del mundo que Fidel Castro.

Me remito a algo de lo que fui testigo presencial. En octubre de 1992 asistí como periodista de “Granma” a una conferencia presidida por Castro que tuvo lugar en La Habana con motivo de cumplirse 30 años de la llamada “Crisis de los Misiles”, en la que participaron algunos de su principales protagonistas.

Asistieron entre otros Robert McNamara, secretario de Defensa de Estados Unidos en aquellos momentos; Arthur Schlesinger y Richard Goodwin, asesores principales del presidente John F. Kennedy; el general William Smith, coordinador de las fuerzas de EEUU declaradas en alerta nuclear; dos altos jefes de la CIA; los generales Anatoly Gribkov, jefe de las fuerzas soviéticas en Cuba, y Georgi Voronkov, efe de las baterías de cohetes antiaéreos soviéticos SAM en la isla; Serguei Khruschev, hijo del entonces gobernante soviético e historiador que tiene en su poder documentos reveladores de su padre; y varios generales cubanos.

En un momento de la conferencia McNamara le pidió a Castro que comentara algo sobre la sugerencia que le hizo a Khruschev de que Moscú debía dar el primer golpe atómico.

Castro casi no dejó terminar de hablar a McNamara. Molesto, pero haciendo un esfuerzo para no insultar y dar puñetazos en la mesa, el comandante respondió: “Eso es falso”. Agregó que eso era una tergiversación de los hechos cocinada por medios de prensa occidentales. Explicó que él sí envió con el embajador soviético en Cuba, Alexei Alexeiev, una carta a Khruschev, pero lo que le dijo fue que si EEUU invadía a Cuba la guerra nuclear era ya inevitable y que la URSS debía dar el primer golpe nuclear antes de que lo hiciera EEUU.

McNamara respondió que haber lanzado ojivas nucleares contra EEUU en respuesta a una invasión a Cuba habría sido una respuesta desproporcionada que además habría desatado una guerra nuclear horrible que habría acabado con los cubanos.

El dictador ripostó que la “dirigencia cubana” (léase Castro) asumía que una invasión a Cuba era el comienzo de la Tercera Guerra Mundial, que la URSS debía atacar primero, y que el pueblo cubano estaba dispuesto a desaparecer.

Tres días después de recibir la carta, el 30 de octubre de 1962, en una reunión en el Kremlin con una delegación de Checoslovaquia, Khruschev mostró su asombro acerca de que “seamos nosotros los primeros en iniciar una guerra atómica”, según narra el líder soviético en sus memorias, publicadas luego de ser destituido en 1964. “Sólo una persona que no tiene idea de lo que significa una guerra nuclear –dice Khruschev en su libro– o que está enceguecida por la pasión revolucionaria, como sucede con Fidel Castro, puede hablar de ese modo…”.

Aquel mismo estadista que ante una eventual invasión propuso iniciar una guerra atómica que habría sepultado a Cuba en el mar y lanzado al mundo a la edad de piedra, no es hoy alguien en que se pueda confiar mucho como salvador de nadie.

Autor

  • Roberto alvarez quinones

    Roberto Alvarez Quiñones (1941), periodista, economista y licenciado en Historia cubano residente en California, con 40 años de experiencia como columnista en el área económica, primero en Cuba en el periódico “Granma” (1968-1995), y simultáneamente en la Televisión Cubana, donde fue comentarista de economía internacional, desde 1982 a 1992. Profesor de la Facultad de Periodismo de la Universidad de La Habana desde 1982 a 1992. Llegó a EEUU en 1995, y en 1996 comenzó a trabajar en el diario “La Opinión” de Los Angeles, donde fue editor y columnista de las secciones de Negocios, Latinoamérica, El Mundo, y el suplemento “Tu Casa” (bienes raíces), hasta 2008. Actualmente es analista económico de Telemundo (TV), y escribe columnas y artículos para varios medios en español de EEUU y España. Es autor de 6 libros, 4 publicados en La Habana y 2 en Caracas, Venezuela. Ha recibido 11 premios de periodismo.

    Ver todas las entradas

Mostrar más

8 comentarios

  1. El día de hoy sí fue el colmo, Fidel Castro no solo pretende convertirse en «salvador del mundo», ahora afirmó en una entrevista que cuando estuvo enfermo «se murió por un momento», y que luego «resucitó». Y que toma eso como una señal porque aún tiene «cosas por hacer». Ahora qué cosas nunca especificó. No sabía si reírme ante tal declaración. Ahora desea hacer un movimiento anti guerra nuclear. Y que vivimos en un mundo de locos. Bueno, eso sí nadie lo va a negar. Locos que llegan al poder con la violencia y se quedan 50 años en base a la represión. Eso es de locos.

  2. Este articulo es muy bueno porque explica claramente lo que se trae entre manos el loco esclerotico de Biran con su defensa de los terroristas aliados suyos de Iran, y porque explica muy bien que el mismo genocida que quiso destruir el mundo hace 48 anos no puede venderse ahora de redentor y de salvador del mundo. Lo que me sigue sacando de quicio es que la prensa mundial le publique sus idioteces y no salga nadie a decir las cosas como las dice este articulo.

  3. Robertico, hablando the armas nucleares, ahora este tipo tiene a Lula hablano de esos armaentos y por su puesto Chavez tambien. Fidel, el instigador, a hecho su sugerencias a Chaves de desarrollar esa ciencia, etonces Lula, para no quedarse atras las quiere tambien.
    No puedo imaginarme a paises lations en este continente con armaentos de esa indole. Tantos anos que hemos tratado de desarmar al mundo de easas cosas diabolicas y ahora bienen estos idotas a querer participar en esa locura mundial que les parece indicar que como cultura «han llegado al tope» con esos armamentos, como membresia en un club muy exclusivo. Iran esta embriagado con su macabro desarrollo cintifico, o por lo menos hasi lo ven los mullah y esos ayatolas y el visco Amadineja…….
    Que horror. Y estos lo quiren traer aqui.

    Muy buen articulo. Gracias. Tu primo
    Eduardito.

  4. Me uno a las acertadas críticas a favor de este análisis de Roberto Álvarez Quiñones. Y aprovecho para decir que la realidad de esta vida le está jugando una gran reversión no sólo a Castro, sino también a toda la izquierda populachera que lo ha endiosado siempre (me refiero a los gobernantes de esos países que lo tratan de imitar y de seguir. No a una izquierda seria que sabe pensar y conoce el daño que este “compañero” y su cuadrilla le ha hecho y está haciendo aún a lo mejor de la democracia). La reversión es que este hombre no se ha muerto aún porque parece que debe vivir un poquito más para que su ridícula postura acabe de borrar la ya poca imagen de líder que tuvo un día (Claro, líder para lo malo, para su habilidad de mantenerse en el poder, pero líder al fin). Si demora un tiempo más hablando sandeces, desvariando constantemente, entonces el ridículo que es ahora pasará a ser —él, la gerontocracia de su hermano y los gobernantes que lo han seguido—una existencia supergrotesca que hará que cuando él muera, todos en un solo conjunto sean más rechazados y aborrecidos que nunca. Lo doloroso de todo esto es que mientras los hermanos Castro estén en el poder, el pueblo va a seguir demolido bajo la terrible noche oscura de un tiempo que ya dura más de cincuenta años… Gracias Roberto por tu buen comentario que, como siempre, da en el mismo centro de la diana, Manuel

  5. Magnifico analisis de la hipocresia sin limites de Fidel Castro. Si por fin Iran logra tener bombas atomicas entonces la guerra nuclear si va a ser inevitable porque los ayatolas, al igual que hubiera hecho el dictador cubano en 1962, si son capaces de lanzarle cohetes nucleares a Israel.
    Ojala hubiera mas analisis como este, pues a veces uno esta en el pueblo y no ve las casas, como dice un dicho cubano, y hace falta que alguien diga donde estan las casas, y lo que se esconde detras de ellas.

  6. Felicitaciones una vez más a Roberto Alvarez-Quiñonez por tan oportuno y necesario artículo. Lo de Irán es muy, pero muy preocupante, hace unos días su Presidente dijo más o menos así: “Nuestras opciones no tendrán límites (…) Concernirán a todo el planeta», en respuesta a una pregunta relativa a la eventual reacción de Teherán a un ataque. Me pregunto si alguien como el Presidente Iraní que esta dispuesto a atacar con misiles nucleares a todo …¿EL PLANETA ? sin importarle nada, es alguien fiable para tener relaciones, o confiar en sus «fines pacíficos».
    Las elecciones presidenciales de Brasil se acercan, y sería bueno saber si Dilma Rouseff, candidata oficialista, continuara con esas relaciones (con Iran), o si apoyara a Iran en ese derecho. Los periodistas tienen ahora una oportunidad de oro preguntarle a ella (cara a cara) y saber su posición de una vez.

    En cuanto a Fidel Castro, ¿qué podemos decir? Definitivamente confundió hace años en la crisis de los misiles, lo que es y desencadena un holocausto nuclear con su experiencia en la Sierra Maestra. Ahora, quiere salvar al mundo. De verdad que parece un chiste. Castro no tiene autoridad moral. Casi lleva a Cuba a la destrucción en esa crisis en los años 60, cegado por el odio y la soberbia. No sucedió así. Parece que prefirió destruirla el mismo, poco a poco, y no por la vía nuclear, sino con el comunismo y autoritarismo que maneja y controla todo. Ese MAL, pero MAL ejemplo ha hecho más daño a América Latina que una bomba nuclear.

  7. FIDEL ROMPIO EL DESCAROMETRO
    Se necesita tener muy poca verguenza, y ser muy cinico, para que un hombre como Fidel Castro, que se dedico toda su vida de dictador a tratar de incendiar a la America Latina y al mundo, y que en 1962 propuso desatar una guerra atomica, tenga el descaro de presentarse ahora como la Madre Teresa de Calcuta que quiere la paz del mundo.
    Ese dialogo que presencio Roberto entre Mcnamara y la Bestia del Caribe vale un millon
    de dolares. Lo felicito por este analisis tan bueno del cinismo de Fidel que ahora juega a mansa ovejita pacifista para que le den el Premio Nobel de la Paz (que ya no vale un kilo prieto). Es verdad que lo que esta haciendo Fidel es levantar una muralla de humo para que Iran construya bombas atomicas.

  8. Considero muy acertado y muy a tiempo este comentario de Roberto Alvarez Quiñones acerca del tirano Castro. Acertado, porque muestra desollado al lobo que en realidad ha sido Castro, el cual siempre ha pretendido mostrarse como oveja. Oportuno, porque en su megalomanía delirante el «coma andante» Castro (quien debía nombrarse Armando Guerra, por su belicosidad), ha dado inicio a una campañita, secundada por su títere venezolano Hugo Chávez, pretendiendo le sea otrogado el Premio Nobel de la Paz.
    Gracias por tan excelente trabajo, Roberto.
    Tony Ruano.

Botón volver arriba