La orden ejecutiva de Biden: por ganar las elecciones pierde a los latinos

Las solicitudes de asilo presentadas por migrantes en la frontera con México se han multiplicado llegando a casi un millón de casos en espera, según la Oficina Ejecutiva de Revisión de Inmigración en el Departamento de Justicia, Obviamente el país no está preparado para ello, el gobierno tiene todo el derecho de regular quién entra y quién no, y de todas maneras, las olas migratorias a Estados Unidos se manejaron siempre como una válvula relacionada con el crecimiento económico en general y el lucro de determinadas industrias que utilizan mano de obra barata, en particular. 

Pero en este caso no hablamos de la migración corriente, sino la específica de gente que busca asilo. Estas solicitudes son legales según el derecho estadounidense e internacional, que otorga protección a quienes enfrentan el peligro en sus patrias. 

Es así como miles de personas han entrado al país cada mes provenientes mayormente de El Salvador, Guatemala, Honduras, Haití, Nicaragua y Cuba., así como de China y varios países africanos, entre otros. 

Durante su presidencia Donald Trump tomó medidas extremas y crueles para detener el flujo de inmigración indocumentada en general y de solicitantes de asilo en particular. Entre ellas, la sustracción de los hijos a sus padres sin explicaciones ni información y conminar a los solicitantes a esperar en campos de refugiados del lado mexicano en condiciones lamentables.  

Haciendo del migratorio un tema central para sus aspiraciones presidenciales, Trump insufla odio contra los migrantes describiéndolos como “alimañas”, “basura”, “invasores” y “criminales”. 

Ahora, el presidente Biden, en su lucha por la reelección, ha decidido promulgar una orden ejecutiva que le permita sellar temporalmente la frontera cuando los cruces llegan a un umbral, después del cual se faculta a los agentes migratorios a impedir la presentación de solicitudes. 

La orden utiliza una autoridad conocida como «212 (f)», que había sido denunciada por los demócratas cuando la usó Trump.

A comienzos de año el Congreso negociaba un acuerdo bipartidario que incluía un detonante  que obligaría al cierre fronterizo cuando la cantidad de cruces diarios sobrepasara los 5,000, calculados cada semana.. Los senadores republicanos rechazaron el acuerdo que ellos mismos habían iniciado después por oposición de Trump. 

Aunque sujeta a cambios, la nueva orden ejecutiva establece un umbral mucho más bajo para el cierre de la frontera: 2,500 cruces diarios. Los números actuales son de 3,500 diarios, por lo el cierre sería inmediato. 

Da la impresión de que se ha consumado un cambio cualitativo en las posiciones de los demócratas que desdibuja las diferencias entre ambos partidos en materia migratoria. 

Quizás a pocos le importa que los inmigrantes siguen siendo el chivo emisario de la política estadounidense. Pero es uno de los temas importantes para la comunidad latina. Con esta orden, Biden y el partido demócrata se mueven hacia posiciones que no consideran suficientemente sus intereses, que sugieren al partido Republicano. El Presidente estaría acercándose a las posiciones del anterior gobierno, que los demócratas correctamente rechazaron y que fueron  suspendidas por las cortes. 

 El primer debate presidencial será en tres semanas, y la orden ejecutiva es claramente el fruto de consideraciones partidarias, porque al mismo tiempo, el número de cruces ha caído considerablemente, en parte debido a un esfuerzo intensivo del gobierno mexicano previo a sus propias elecciones presidenciales.  

La situación fronteriza no se va a solucionar con órdenes ejecutivas. Y menos una que se ensañe aún más con los solicitantes de asilo. Para ello, sigue siendo irremplazable una legislación que aumente el número de funcionarios encargados de procesar las solicitudes, promueva asistencia a los países de donde parten los migrantes y avance la legalización de los millones de indocumentados que viven aquí por décadas.

Autor

  • Fundador y co-editor de HispanicLA. Editor en jefe del diario La Opinión en Los Ángeles hasta enero de 2021 y su actual Editor Emérito. Nació en Buenos Aires, Argentina, vivió en Israel y reside en Los Ángeles, California. Es periodista, bloguero, poeta, novelista y cuentista. Fue director editorial de Huffington Post Voces entre 2011 y 2014 y editor de noticias, también para La Opinión. Anteriormente, corresponsal de radio. -- Founder and co-editor of HispanicLA. Editor-in-chief of the newspaper La Opinión in Los Angeles until January 2021 and Editor Emeritus since then. Born in Buenos Aires, Argentina, lived in Israel and resides in Los Angeles, California. Journalist, blogger, poet, novelist and short story writer. He was editorial director of Huffington Post Voces between 2011 and 2014 and news editor, also for La Opinión. Previously, he was a radio correspondent.

    Ver todas las entradas

Mostrar más
Botón volver arriba