Dos poemas de Luis Alberto Rodríguez Ángeles

Se partió el mundo

Se partió el mundo
con tu regreso triunfal.
Yo,
en el cuarto
donde fragüé el alabastro doliente,
tenía bien guardadas tus miradas;
pegadas con pedacitos de piel
a las paredes de la roca,
lágrimas,
sal y tiempo en que no estuviste.
Y mírate ahora,
sonriente,
poseída,
ausente,
indiferente,
provocadora,
¡Infame!
Turbia memoria.
¿A qué vienes sino a ofenderme?
A burlarte de la obra
de mi triste final.

Laureles ardientes

 

Cualquier tiempo es bueno para pensarte.
Ayer, esta noche o mañana que te vas.
Para imaginarme un lecho de algodón
y tu cuerpo a mi lado,
enfriando fantasmas,
calmándolo todo.
Haces los días complacientes;
climas fríos y laureles ardientes.
Halos de luz sobre tu frente,
una canción de Veloso
y verte….
Sacudes mi piel.
La sacudes de polvo, la dejas limpia,
sin rastro de otras pieles.
Identificas el cuerpo de mis sombras.
Corriges todo lo que hice mal.
Soy tu niño, tu hombre, tu alumno.
Soy tu mono. Soy tu perro.
Soy nacido en el hilo de tu voz,
siempre, a tu lado,
sonriente.

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Autor

  • Luis Alberto Rodríguez (Tizayuca, México, 1983) es escritor y periodista. Autor de “Oficio rojo” (Revolución, 2014) y Eso que se dice hombre (Desde Abajo, 2023) y co-autor de Memoria contra el olvido (Indesol, 2008). Premio Nacional de Periodismo en derechos humanos. Ha divulgado sus piezas de narrativa, ensayo y poesía en diversas publicaciones, incluida Hispanic LA y la revista El Perro, becada por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes. Su obra cotidiana puede encontrarse en su blog http://luisalberto.mx/

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