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Fotos de la frontera: Documentando un campo de detención al aire libre

Hispanic LA en Jacumba, California, en donde cientos de migrantes de todas partes del mundo son concentrados antes de que se procese su pedido de asilo

Una de las regiones más activas, por donde migrantes de todas partes del mundo cruzan de México a Estados Unidos, es la de Jacumba. Una zona semidesértica localizada entre San Diego y Caléxico en donde surgió un nuevo fenómeno: campos de detención al aire libre.

Las estadísticas confirman que en el año fiscal de 2023 hubo un movimiento masivo de migrantes: aproximadamente 2.5 millones. Los mexicanos continúan siendo el grupo más voluminoso. La Patrulla Fronteriza (CBP) reporta que detuvo a 717,000 mexicanos ese año. Seguidos por venezolanos, nicaragüenses, cubanos y haitianos que llegan a 583,000.

En diciembre la situación era tal, que parecía desbordarse. En ese mes, se llegó a reportar alrededor de 10,000 detenciones diarias.

Amenazas y acuerdos

La crítica situación motivó a que las autoridades estadounidenses cerraran algunos cruces fronterizos. Una medida que generó extrema preocupación en México por las consecuencias económicas que podía generar la interrupción del tráfico de mercancías con el socio comercial más importante. Inmediatamente surgieron toda una serie de contactos diplomáticos que culminaron con funcionarios estadounidenses visitando la capital mexicana y, aparentemente, llegando a un acuerdo.

Parte de lo acordado, para garantizar que la frontera se mantuviera abierta, habría sido la promesa de las autoridades mexicanas de implementar medidas de contención de su lado de la frontera. Una promesa que se materializó con el arribo de tropas de la Guardia Nacional mexicana con la misión de patrullar el área y con la detención de migrantes con un objetivo táctico disuasorio.

Jacumba

Los migrantes que logran cruzar la frontera y piden asilo en los Estados Unidos, previo a ser procesados son concentrados en áreas que algunos definen como campos de detención al aire libre.

Las condiciones medioambientales que experimentan los hombres, mujeres y niños que son temporariamente retenidos en estos lugares, antes que se inicie el proceso del pedido de asilo, son deplorables. Esto ha motivado a que organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes hagan ya dos demandas administrativas ante el Departamento de Seguridad Nacional.

La última demanda fue presentada en diciembre por el Center for Gender and Refugee Studies, el International Refugee Assistance Project, el National Immigration Law Center; Al Otro Lado, el  American Friends Service Committee, Border Kindness y la Southern Border Communities Coalition.

El documento de 88 páginas acusa a los agentes de la Patrulla Fronteriza (CBP) de mantener detenidos a los migrantes en espacios abiertos durante horas y a veces días en condiciones inaceptables que ni siquiera cumplen con el protocolo de la misma agencia migratoria. Más específicamente, no se les provee protección contra las inclemencias, ni se les da comida, no hay facilidades sanitarias, ni atención médica.

Detención al aire libre

Hispanic LA visitó la región semanas atrás y, en una serie de fotografías tomadas por Francisco Lozano, se documentó la situación más que precaria que confrontan los migrantes al ser concentrados en centros de detención al aire libre..

 

Cientos de migrantes en su mayoría de países latinoamericanos y de la China al entregarse a las autoridades migratorias en las inmediaciones de Jacumba, California. Foto: Hispanic LA/Francisco Lozano

 

 

 

 

Hombres migrantes y sus familias acampan en una colina con vista del resto del campamento. Atrás, el muro que divide. Este es uno de los tres campamentos al aire libre en el desierto al este de San Diego, California. Foto: Hispanic LA/Francisco Lozano

 

 

 

 


Agentes de la Patrulla Fronteriza (CBP) se preparan para procesar a solicitantes de asilo que se entregan voluntariamente en los campos de detención al aire libre en el desierto de Jacumba, California. Foto: Hispanic LA/Francisco Lozano

 

En los campos de detención al aire libre de Jacumba, California, las autoridades migratorias no proveen ningún tipo de asistencia, ni alimentos, ni atención médica. Las tiendas de campaña son donadas por organizaciones sin fines de lucro como Al Otro Lado y Border Kindness. Foto: Hispanic LA/Francisco Lozano

 

 

Mujer migrante, exhausta, se sienta a reposar mientras cuida las pertenencias de sus hijos después de haber cruzado la frontera en el desierto de Jacumba, California. Foto: Hispanic LA/Francisco Lozano

 

 

 

Niños juegan mientras tratan de protegerse del frío en una tienda de campaña hecha con cobijas, junto a una fogata, en un campo de detención al aire libre, en Jacumba, California. Foto: Hispanic LA/Francisco Lozano

 

 

 

 

Tras pasar la noche en el desierto de Jacumba, California, los migrantes son alineados y la Patrulla Fronteriza (CBP) los dirige hasta un autobús en donde serán esposados antes de ser conducidos a un centro de procesamiento. Foto: Hispanic LA/Francisco Lozano

Este artículo fue apoyado en su totalidad, o en parte, por fondos proporcionados por el Estado de California y administrados por la Biblioteca del Estado de California.

Autor

  • Nestor M. Fantini, M.A., Ph.D. (ABD), is an Argentine-American journalist, educator, and human rights activist based in California. Since 2018, Fantini has been co-editor of the online magazine HispanicLA.com. Between 2005 and 2015 he was the main coordinator of the Peña Literaria La Luciérnaga. He is the author of ´De mi abuela, soldados y Arminda´ (2015), his stories appear in ´Mirando hacia el sur´ (1997) and he is co-editor of the ´Antología de La Luciérnaga´ (2010). He is currently an adjunct professor of sociology at Rio Hondo College, Whittier, California. As a refugee and former political prisoner who was adopted as a Prisoner of Conscience by Amnesty International, Fantini has dedicated his life to promoting the memory of the victims of state terrorism of the Argentine civil-military dictatorship of the 1970s and is currently coordinator of Amnesty International San Fernando Valley. Fantini graduated from Woodsworth College and the University of Toronto. - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - Néstor M. Fantini , M.A., Ph.D. (ABD), es un periodista, educador y activista de derechos humanos argentino-estadounidense que reside en California. Desde 2018, Fantini es coeditor de la revista online HispanicLA.com. Entre 2005 y 2015 fue el coordinador principal de la Peña Literaria La Luciérnaga. Es autor de De mi abuela, soldados y Arminda (2015), sus cuentos aparecen en Mirando hacia el sur (1997) y es coeditor de la Antología de La Luciérnaga (2010). Actualmente es profesor adjunto de sociología, en Rio Hondo College, Whittier, California. Como refugiado y ex prisionero político que fuera adoptado como Prisionero de Conciencia por Amnistía Internacional, Fantini ha dedicado su vida a promover la memoria de las víctimas del terrorismo de estado de la dictadura cívico-militar argentina de la década de 1970 y actualmente es coordinador de Amnesty International San Fernando Valley. Fantini se graduó de Woodsworth College y de la Universidad de Toronto.

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