Dos poemas de Herminia Ibaceta
¡Despierta libertad!
*
Promesa de libertad,
deuda que jamás se salda,
colgadas llevo a la espalda
tu tardanza y mi ansiedad.
Sombra que en la oscuridad
izas velas y te alejas,
a la deriva, mis quejas
hundes en ciegas mareas
y victoriosa recreas
el dominio de las rejas.
*
El tiempo muerde las horas…
En su ajeno decursar
se pierden en el andar
las noches y las auroras.
Sol que generoso doras
de otras playas las arenas,
en los ríos de mis venas
se quebraron tus reflejos
y en enlutados espejos
marchitan mis azucenas.
*
Tengo las arcas vacías
de tu pan y de tu vino
y vacío está el camino
de estrellas y de utopías.
¿Por qué osada desafías
mi suerte de hambre y de sed?
¿Por qué en intrincada red
de olvidos me has enterrado
y como el Cristo, clavado,
me desangro en la pared?
*
Despiértate, libertad,
salta del sueño, navega,
ante mis costas despliega
el rostro de la equidad.
Te espero en la soledad
vistiendo de sol y brisa
sobre esta roca mambisa
tallada a golpes de fuego.
¡Concédeme, al fin, el riego
vertical de tu sonrisa!
*
*
Todo el mundo calla…
*
Todo el mundo escucha, todo el mundo sabe,
todo el mundo acepta, todo el mundo calla…
Y yo me consumo, ceniza en la brasa,
cada vez más isla, cada vez más triste, cada vez más alba.
El tiempo me cruza sordo,
y se me escapa en dedos salobres y sangre en resaca.
El astro se oculta,
rebeldes los sueños escapan
dejándome seca la flor en la entraña.
Todo el mundo sabe, todo el mundo calla…
El odio retoña, los yugos entallan silencios al labio,
distancias al alma.
Mi vuelo agoniza…
en rudos embates se quiebran mis alas,
y siento crecerme la desesperanza
cada vez más honda, cada vez más cruda, cada vez más larga.
Todo el mundo sabe, todo el mundo calla…
Giran en redondo las tierras hermanas,
para defenderme ni una voz se alza,
se han quedado mudas todas las gargantas.
Son muchos inviernos…
Ya no queda espacio para la ignorancia.
Todo el mundo escucha, todo el mundo sabe,
todo el mundo acepta, todo el mundo calla…
Y yo sigo ardiendo, ceniza en la fragua,
cada vez más sola, cada vez más lejos, cada vez más Patria.