El Fondo para la Conservación de las Tierras y Aguas podría acabarse
Una de las pocas causas apartidistas que todavía existen y apoya economías, ambiente y comunidades sanas, está en jaque. Durante cincuenta años, el Fondo para la Conservación de las Tierras y Aguas (LWCF por sus siglas en inglés), ha invertido en parques y espacios verdes. donde nuestros hijos juegan. En bosques y espacios abiertos en los que cazamos, hacemos actividades recreativas y obtenemos recursos naturales, Y en los ríos, lagos y reservas en las que pescamos, nadamos, remamos y recibimos gran parte del agua que utilizamos diariamente. Todo ello sin hacer uso de los impuestos de los contribuyentes.
Fecha de expiración
Increíblemente, el LWCF tiene fecha de expiración a finales de este mes, debido a un desacuerdo en el Congreso sobre la manera como estos fondos deben ser considerados gastos continuos.
Cada año $900 millones de dólares de los impuestos de las extracciones petroleras marinas son depositados en este fondo. Después, el dinero es invertido en distintas formas, para proteger tierras, aguas y áreas recreativas vitales para todos los estadounidenses.
El LWCF literalmente subsidia las tierras públicas en cada distrito y cada condado alrededor del país. Para algunos parques y espacios verdes, ésta probablemente es la única manera de financiamiento que reciben para mantenimiento y mejoras. Especialmente es así después de arrasadores recortes al Servicio Nacional de Parques, el Servicio Forestal de los EE.UU, y otros presupuestos de agencias de manejo de tierras.
Es vital decirle a los miembros del Congreso que el LWCF necesita una reautorización permanente con financiamiento completo y exclusivo. Sin él, los beneficios económicos locales decaerán. Estas tierras públicas brindan una amplia variedad de espacios y servicios que activan las economías al proveer empleos locales e ingresos del turismo.
Estos espacios también albergan árboles, bosques, áreas verdes y lugares abiertos que sostienen la salud mental, física y emocional, así como el bienestar de las comunidades, lo que reduce los costos de atención a la salud e incrementa la productividad, reduciendo por ende la carga financiera del trabajador estadounidense.
Ganar-ganar para todos nosotros
El fondo ahorra dólares de los contribuyentes, crea empleos estadounidenses y beneficia a la gente, tanto de las zonas rurales, como urbanas. Es un ganar-ganar para todos nosotros. El LWFC ha protegido tierras en cada estado y apoyado a más de 41,000 proyectos de parques estatales y locales.
Las encuestas muestran que los votantes conservadores, moderados y liberales, están a favor del fondo y muchos legisladores Demócratas y Republicanos prominentes lo apoyan fuertemente debido a los ingresos que brinda a sus estados de origen.
La industria de los espacios abiertos es uno de los sectores más saludables de nuestra economía, incluso en tiempos difíciles. La recreación en espacios al aire libre, la conservación de recursos naturales y las históricas actividades de preservación sostienen 9.4 millones de empleos y contribuyen con $1.06 billones de USD anualmente, esto de acuerdo con la Federación Nacional de Pesca y Vida Silvestre. La industria también tiene el potencial de crear entre 100,000 y 200,000 empleos estadounidenses. Esto ayudaría a muchas comunidades locales y rurales a volverse independientes. Podrían prosperar económicamente con recursos que esta industria de recreación y turismo al aire libre provee.
Inversión en parques y espacios verdes
El retorno de la inversión en los grandes espacios abierto es tremendo. El incremento al acceso a este tipo de espacios, también puede dar paso a gente más sana y costos de cuidado de la salud más bajos. De acuerdo con Nature Conservancy, invertir en parques y espacios verdes puede ayudar a evitar costos anuales de hasta $11,700 millones de dólares en cuidados de la salud. Esto actualmente se agrega al casi 17% de Producto Interno Bruto (PIB), y hasta casi $928 millones de USD en gastos relacionados con la criminalidad.
El LWFC también es una inversión en el futuro de nuestros niños. Los campus de preparatorias, los paisajes y parques de escuelas que tienen espacios verdes, están relacionados a índices de graduación más altos. Esto lleva a una proyección de incremento de ingresos vitalicios anuales de $1,300 millones de dólares.
También aumenta el acceso de espacios verdes, árboles y zonas forestales, así como oportunidades de protección de los recursos naturales, en las comunidades marginadas y urbanas. Estas actividades crean un sentido de comunidad más fuerte.
¡Nuestros espacios verdes merecen ser apoyados! Empodérate y pide a tus representantes en el Congreso que salven el LWCF y aprueben una extensión permanente hoy mismo. Nuestro compromiso y su compromiso hacia nuestros parques, bosques urbanos y rurales, cuerpos de agua y espacios abiertos, son esenciales para una economía más fuerte, así como la seguridad, salud y bienestar general de todos los estadounidenses.
Felipe Benítez es el Director Ejecutivo de Corazón Latino, una organización sin fines de lucro que moviliza comunidades diversas en torno de asuntos ambientales y soluciones de salud pública, y además, promueve la educación para la conservación, la participación ciudadana y la justicia social.