Oscilaciones de la dignidad humana en el sur del mundo
Se convoca a marchar
Algo positivo está pasando entre las nuevas generaciones. Ya no da lo mismo atropellar o matar a un no blanco. Ya no da lo mismo atropellar o matar una mujer pobre. Ya no da lo mismo abusar de una niña o niño. Ya no da lo mismo maltratar un animal, ensuciar la naturaleza, ostentar marfiles y diamantes. Una conciencia de dignidad colectiva se apodera de las redes digitales y medios de comunicación. Se convoca a marchar por causas que conciernen a todos. Las denuncias tienen mil variantes, tal como las confesiones y condenas, que confluyen a poco andar en sentencias inapelables.
Un crimen atroz
Catrillanca le duele al país. La policía se vio en problemas para justificar lo sucedido y le envió una versión edulcorada al gobierno. El gobierno retransmitió la versión policial al país. Pronto se descubrió que todas las versiones eran incorrectas, distractoras, elusivas, y que la única verdad es que se cometió un crimen atroz.
Se acerca la Navidad y con ella la mayor tristeza de todos aquellos que no pueden cumplir las expectativas que impone el mercado. La telebasura educa en la importancia del sobre consumo. En la balanza de cada familia no privilegiada, el amor navideño vale muchos salarios, cuotas interminables, tasas de interés que cuadruplican el valor de lo adquirido. Pero la locura navideña no escucha razones. El gesto simple, el abrazo silencioso, la tarjeta de buenos deseos escrita a mano, todo ello parece parte de un cuento de hadas de otra galaxia.