Joe Biden en la encrucijada política por su apoyo a Netanyahu
El Presidente, para ganar en noviembre, necesita que los votantes jóvenes acudan a las urnas
El presidente Biden se encuentra en una encrucijada política. Por una parte, el descontento y las protestas de los estudiantes universitarios aumentan por su apoyo al gobierno de Israel y por otra parte los republicanos en el Congreso lo critican por, según ellos, «tener miedo» y ser muy débil antes las protestas propalestinas.
El presidente criticó lo ocurrido en la Universidad de Columbia en Nueva York y en otros campus universitarios como el de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) durante la semana pasada. Estos eventos han acaparado la atención nacional e internacional. A medida que aumentaban las tensiones la policía desmanteló algunos campamentos por la fuerza, dando como resultado enfrentamientos con cientos de detenidos y estudiantes lastimados.
¿Apoyar la disidencia o perder el apoyo?
Biden en un comunicado publicado por la oficina de prensa de la Casa Blanca dijo: «Destruir propiedades no es una protesta pacífica, va contra la ley. Vandalismo, allanamiento de morada, romper ventanas, cerrar campus, obligar a cancelar clases y graduaciones. Nada de esto es una protesta pacífica, ni amenazar a la gente, ni intimidar a la gente. La disidencia es esencial para la democracia, pero la disidencia nunca debe conducir al desorden”.
El expresidente Trump, ha calificado las protestas de «vergonzosas» y ha criticado a Biden por su falta de comentarios públicos sobre las escenas que se están viviendo en todo el país.
La situación es políticamente complicada para Biden, que ya se enfrenta a las críticas de parte de su base por lo que consideran una mala gestión por su parte de la guerra entre Israel y Hamas. Miles de votantes han emitido votos de protesta contra Biden en las primarias demócratas, y una encuesta de la CNN publicada el fin de semana mostraba a Biden por detrás de Trump entre los votantes jóvenes.
Las elecciones de noviembre
Los senadores demócratas, que se enfrentan a elecciones muy cerradas en sus estados en noviembre, están pidiendo a los rectores de las universidades que tomen medidas enérgicas contra las protestas en los campus, ya que las imágenes de manifestantes desplegando banderas y consignas propalestinas se están convirtiendo en un problema político para el presidente Biden y sus aliados.
Sin embargo, destacados líderes progresistas demócratas como la representante Alexandra Ocasio Cortez de New York, defienden el derecho de los estudiantes a protestar y se oponen a las peticiones de que el gobierno federal intervenga en los campus universitarios.
El presidente de la Conferencia Republicana del Senado, el republicano John Barrasso, pidió a Biden que pusiera orden.
«Joe Biden prefiere vacilar a actuar. ¿Por qué se inclina ante estos manifestantes pro Hamás? Es porque se acercan las elecciones y sabe que necesita sus votos. Lo que el Presidente debería estar haciendo es aplicar la ley, devolver el orden a los campus y hacer que los estudiantes vuelvan a las aulas».
La mirada de los jóvenes
Una encuesta realizada por el New York Times y el Siena College entre 1.059 votantes registrados de todo el país entre el 7 y el 11 de abril reveló que el 45% de los votantes menores de 30 años simpatizan más con los palestinos que con los israelíes en el conflicto. Sólo el 15% del mismo grupo dijo sentir más simpatía por Israel, en medio del creciente número de muertos en Gaza.
Los estrategas demócratas reconocen que Biden necesita que los jóvenes votantes acudan a las urnas en noviembre para ganar, y son conscientes de lo que dicen las encuestas.
El senador Bernie Sanders (Independiente de Vermont) quien se ha mostrado muy crítico con la forma en que el primer ministro israelí Benjamín Netanyahu está llevando a cabo la guerra y lo responsabiliza de la crisis humanitaria en Gaza, también ha criticado al presidente Biden por su manejo de la crisis. Sin embargo en una entrevista exclusiva con USA TODAY esta semana, aclaró que no permitiría que sus diferencias con Biden en algunos temas se interpusieran en el camino de enfrentarse a algo más urgente: “la amenaza del expresidente Donald Trump, el presunto candidato republicano a la presidencia”.
Sanders cree que hace tiempo que Biden debería haber cambiado su política respecto a Israel, pero también le preocupa que los jóvenes universitarios estén subestimando la verdadera amenaza que supone Trump y que, en su enfado por Israel y otros asuntos, no reconozcan que Biden está más de su lado, aunque no esté donde ellos quieren respecto a Israel.
«Espero que la mayoría de los jóvenes y manifestantes no quieran que Donald Trump, un racista, sexista, homófobo que no reconoce la realidad del cambio climático, sea elegido presidente de Estados Unidos,” dijo Sanders a USA TODAY.
La población no aprueba la guerra
Una encuesta de Gallup publicada el 27 de marzo, mostró que el 55% de todos los estadounidenses desaprueban la acción militar de Israel. Esto incluye al 75% de los demócratas, frente al 63% que opinaba lo mismo el pasado noviembre.
Biden firmó en abril una ley de ayuda exterior de 95.000 millones de dólares, que incluye 26.000 millones en fondos para Israel y ayuda humanitaria para Gaza y otros lugares. Sanders votó en contra de la medida.
Sanders dijo que, aunque el dinero ha sido aprobado por el Congreso y firmado por el Presidente, aún no ha sido desembolsado.
«El presidente tiene que decirle a Netanyahu ‘no vas a recibir ni un céntimo a menos que haya un aumento enorme y significativo de la ayuda humanitaria, que acabe mañana mismo con el potencial de hambruna, que pongas fin a las terribles acciones de los colonos en Cisjordania y que comencemos a debatir seriamente una solución de dos estados. Si quieren el dinero, estas son las cosas que tienen que hacer».