Los estudiantes nos enseñaron una lección, por Javier Sierra
Es difícil ignorar esa piedra en el ojo llamada impeachment, pero esta vez quiero concentrarme en la maravillosa lección de civismo que nos han dado millones de jóvenes en todo el mundo durante la Huelga Climática.
La protesta individual que la activista Greta Thunberg empezó hace un año en Suecia contra la inacción climática, se ha convertido en un fenómeno global. 7,6 millones de jóvenes y no tan jóvenes marcharon por las calles de todo el mundo exigiendo a los líderes mundiales acción climática inmediata y efectiva.
Lastimosamente, la Cumbre Climática de la ONU en Nueva York volvió a decepcionar. Entre los 70 países que se comprometieron a intensificar sus compromisos climáticos, no se encontraban los tres peores contaminadores, China, Estados Unidos e India.
Ante este fracaso, Thunberg lanzó un “Yo Acuso” de proporciones épicas contra los líderes mundiales, diciendo “¡Como se atreven! Ustedes se han robado mis sueños y mi niñez con sus palabras huecas”.
Las palabras de Thunberg, sin embargo, están teniendo extraordinarias consecuencias alrededor del mundo.
En las recientes elecciones en Austria, los Verdes triplicaron sus votos, lo cual les permitirá formar una coalición de gobierno con el partido en el poder.
Asimismo, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, declaró hace unas semanas que la lucha climática será su prioridad número uno y prometió que el 25% de su presupuesto se dedicará a adoptar fuentes limpias y renovables.
El sector privado también se subió a la ola verde. Amazon anunció que alcanzará la neutralidad de carbono para 2040, una década antes de la meta del Acuerdo de París. El mismo día Google informó que va a romper el récord corporativo invirtiendo $2.000 millones en proyectos de energía renovable. Estos anuncios surgieron tras que trabajadores de Amazon, Google y otras compañías tecnológicas se unieran a la Huelga Climática.
Pero hay que apurarse. El Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU emitió un alarmante informe sobre el estado de los océanos y la criósfera (las superficies heladas) del planeta. El reporte indica que tras décadas de absorber el 25% del exceso de calentamiento en la Tierra, el daño en muchos casos ya es irreversible en la riqueza y biodiversidad de los mares. Y advierte que para el año 2100, el nivel del mar subirá más de un metro, poniendo en serio peligro a ciudades como Los Angeles, San Diego, Miami o Nueva Orleáns.
El reto climático es inmenso y existencial. Pero tras ver a millones de chicos y chicas dar la mayor lección generacional de la historia, a todos nos toca seguir peleando por su futuro y el de nuestra especie.
Javier Sierra es columnista del Sierra Club. Sígalo en Twitter @javier_SC