Medicaid y la alarmante pérdida de beneficiarios

El programa de seguro médico más grande de los Estados Unidos, brinda cobertura médica gratuita o de muy bajo costo a unos 83 millones de afiliados. Sin embargo, muchos se están quedando afuera tras las cancelaciones pos pandemia. Ethnic Media Services (EMS) junto a la Robert Wood Johnson Foundation, organizaron una conferencia de prensa con especialistas, quienes explicaron cómo recuperar la elegibilidad.

“Las estadísticas son contundentes, unos 23 millones de personas entre los que se incluyen 3 millones de niños, han perdido o corren riesgo de perder su cobertura médica. De ellos, el 69% ha sido cancelado no porque no fueran elegibles sino debido a errores de papeleo” comentó Sunita Sohrabji, periodista de EMS. Y agregó que “ampliar Medicaid es una de las formas más importantes en que los estados pueden aumentar las tasas de cobertura y lograr la tan ansiada equidad sanitaria. Sin embargo, diez estados del sur han optado por no hacerlo, acusando algunas de las peores desigualdades del país”.

Para que todos los estados amplíen el seguro

Katherine Hempstead, asesora de políticas de la Robert Wood Johnson Foundation (RWJF), fue la primer oradora.

“Medicaid es un programa creado en 1965 como asociación federal y estatal, es decir con dinero de ambos fondos. En los estados más pobres, el gobierno federal invierte más», dijo Hempstead. «Hablar de Medicaid es hablar de 50 programas distintos, porque cada estado tiene sus modos; por ejemplo, en tres cuartos de los estados se contratan a compañías de seguros para que manejen el programa”.

-¿Cuántos son los afiliados a Medicaid en el país?

-Se estiman unos 82 millones de los cuales, casi un cuarto, son niños. La mayor parte de los inscriptos son mujeres embarazadas, personas de bajos recursos, personas con discapacidad o de la tercera edad.

-¿El programa se creó con ese fin?

-Originalmente el programa estaba destinado a grupos de bajos recursos, fuesen estadounidenses o inmigrantes calificados. Con el tiempo se fue ampliando la elegibilidad para adultos de 19 a 64 años con ingresos menores al índice de pobreza federal. En 2012, el Tribunal Supremo dictaminó que la ampliación era opcional para cada estado. Eso ha determinado problemas, ya que algunos estados han decidido no expandirlo. La mayor parte de esos estados están en el sur; Texas, Florida, Mississippi, Georgia, Tennessee, Alabama, Carolina del Sur y Colorado…

-Muchos de esos estados tienen una gran inmigración…

-De hecho, queremos animar a los estados a ampliar la cobertura a los inmigrantes más allá de su estatus legal. Estados como California, Oregon, New York o New Hampshire han decidido tomar la totalidad del servicio. Algunos han decidido cubrir sólo a niños o adultos. En Illinois, por ejemplo, Medicaid es sólo para la tercera edad… Desde la fundación, estamos muy comprometidos para que todo el mundo tenga acceso a Medicaid y tenemos como prioridad reducir el tamaño de la población sin seguro médico.

“Originalmente, el programa estaba destinado a grupos de bajos recursos, fuesen estadounidenses o inmigrantes calificados. Con el tiempo se fue ampliando para adultos con ingresos menores al índice de pobreza federal. Algunos estados como Texas, Florida, Mississippi, Georgia, Tennessee, Alabama, Carolina del sur y Colorado, han decidido no expandirlo. Queremos animar a todos los estados a ampliar la cobertura a los inmigrantes más allá de su estatus legal. Desde la fundación, nuestra meta es reducir el tamaño de la población sin seguro médico”.
Katherine Hempstead

Para asegurar a los más jóvenes

Martha Sánchez, directora de políticas de cuidados de la salud en la Young Invincibles, dijo que “somos una organización que amplifica las voces de los jóvenes hasta 24 años. Trabajamos con ellos en políticas que mejoren su salud y sus vidas. Nos fundamos en 2009 durante el Obamacare, para que los jóvenes tuvieran cobertura hasta los 26 años bajo el seguro de sus padres. Y seguimos hasta ahora”.

-¿Qué pasa hoy con la elegibilidad juvenil?

– Un estudio del Centro para el Control de las Enfermedades (CDC), demostró que la mitad de los jóvenes hasta los 34 años tiene, por lo menos, una enfermedad crónica, desde asma y obesidad hasta problemas de salud mental y diabetes. También que un tercio de los jóvenes están enfrentando alguna crisis de salud mental entre los 18 y 24 años, como ansiedad o depresión… Hay necesidad de mejorar los cuidados. Esta población es el futuro de nuestra fuerza laboral en la economía de los Estados Unidos.

-¿Los jóvenes tiene seguros privados?

-Los jóvenes son el grupo que tiene menos seguro en todo el país. Curiosamente, los estudios y estadísticas han demostrado que muchos jóvenes padecen cáncer de colon, que normalmente es una enfermedad de los adultos. Hoy, nuestro sistema de salud no está dando respuesta a los problemas sanitarios de los jóvenes.

-¿Cómo definirías a esa población de 18 a 34 años?

-Es una etapa de transición de adultos-jóvenes. Los de bajos recursos tenían Medicaid pero muchos ya no son elegibles porque son estudiantes o se les venden planes privados. Muchos no saben cómo inscribirse o desconocen los créditos que ahora tenemos. Nosotros les proveemos información para que permanezcan o renueven su cobertura. Y si no son elegibles, tienen otras opciones como el Obamacare.

-¿Una sugerencia?

-Debemos implementar políticas efectivas para que todos esos jóvenes estén asegurados. Yo crecí con Medicaid y desconocía todos los beneficios hasta que fui estudiante universitaria. Hay estrategias que podemos usar para fortalecer este programa y que sea asequible y aprovechable para todos, sin permanecer frustrados por una lista de espera. La idea es expandir el programa y fortalecerlo, también para las familias inmigrantes sin importar su estatus.

“Un estudio del Centro para el Control de las Enfermedades (CDC),  demostró que la mitad de los jóvenes hasta los 34 años tiene, por lo menos, una enfermedad crónica desde asma y obesidad hasta problemas de salud mental y diabetes. También que un tercio de los jóvenes están enfrentando alguna crisis de salud mental como ansiedad o depresión… hay necesidad de mejorar los cuidados. Esta población es el futuro de nuestra fuerza laboral en la economía de los Estados Unidos”.
Martha Sánchez

Los niños primero

Joan Alker, director ejecutivo y co-fundador del Center for Children and Families y profesor e investigador de la Universidad de Georgetown, indicó que “la comunidad tiene necesidad de saber que muchos chicos han perdido Medicaid debido al proceso de cancelación. Todavía son elegibles y debemos incluirlos de nuevo ahora que vuelven las clases. Nuestra misión es asegurar que niños y familias tengan cuidado asequible de salud y de calidad”.

-¿Faltan medidas federales?

-Durante el COVID,  el presidente pasó una ley federal para que los estados tuvieran a todo el mundo inscripto en Medicaid, e incluso recibieron dinero extra para cubrir esos costos. Pero este último año, la mayor parte de los estados han chequeado la elegibilidad de todas las personas y muchos se han caído del seguro. Es algo muy grave porque la mitad de los niños del país, así como muchas comunidades racializadas, están cubiertas por Medicaid. Ha habido muchos errores de papeleo que produjeron esa cancelación. Hemos estado siguiendo los datos y hay unas 15 millones de personas menos inscriptas en todo el país.

-¿Tienen un registro de los estados con más cancelaciones?

-Los estados que más personas inscriptas han perdido son Utah (36.8%), Colorado (34.8%), Montana (29.3%) y Texas (29.2%). Además, unos 5.5 millones de chicos han perdido la cobertura, de los cuales no sabemos la raza ni la etnia porque no están especificados en los informes. Igual sabemos que las comunidades de color o racializadas, ya sean indígenas o inmigrantes, son las que están siendo más impactadas. Texas ha perdido 1.3 millones de niños, Florida 542,000 y California 373,000. La idea es que los niños tengan un comienzo de clases favorable. Otros estados como Carolina del Norte o Kentuky han hecho lo imposible para incluirlos. Hay chicos que no reciben sus medicamentos, chicos con asma que no reciben sus aparatos de oxígeno y otros que han perdido la continuidad de sus medicamentos. Los niños no están siendo cuidados por el sistema médico.

-¿Un mensaje?

-Hay que pasar el mensaje a los padres, sobre todo en los estados más afectados,  para que sepan que muchos de sus niños siguen siendo elegibles, y para que pidan ayuda en las escuelas, iglesias o fuentes comunitarias de confianza y se vuelvan a inscribir.

“Los estados que más personas inscriptas han perdido son Utah (36.8%), Colorado (34.8%), Montana (29.3%) y Texas (29.2%). Además, unos 5.5 millones de chicos han perdido la cobertura, de los cuales no sabemos la raza ni la etnia, aunque las comunidades racializadas están siendo mucho más impactadas. Texas ha perdido 1.3 millones de niños, Florida 542,000 y California 373,000. Otros estados como Carolina del Norte y Kentuky, han hecho lo imposible para incluirlos. Hay chicos que no reciben sus medicamentos, chicos con asma que no reciben sus aparatos de oxígeno  y otros que han perdido la continuidad de sus medicamentos. Los niños no están siendo cuidados por el sistema médico”.
Joan Alker

Latinos, “unidos en Estados Unidos”

Stan Dorn es el director de políticas de salud del proyecto Unidos US.

“Somos la organización nacional más grande que brega por los derechos civiles de la comunidad latina», comentó Dorn. «No tenemos números exactos para la raza o la etnia de las personas canceladas, pero asumimos que las personas latinas y afrodescendientes tienen muchas más chances de quedar afuera de Medicaid. Las pérdidas han sido inmensas para estas comunidades y en un año, han exedido las cancelaciones históricas. Hoy Medicaid, cubre a casi 4 millones menos de latinos, siendo que la pérdida más grande se había registrado en 2019 con un millón. Los afrodescendientes, por su parte, perdieron 2.7 millones, la mayoría de los casos por factores administrativos. Muchas personas no reicibieron los papeles y, de quienes los recibieron, el 60% no se pudo inscribir”.

-¿Una conclusión?

-Los programas como Medicaid no debieran perderse nunca, ya que proveen cuidado equitativo a toda la población. Eliminar la carga administrativa para las familias y usar la información que el gobierno ya tiene sobre los impuestos, es una buena opción antes de esperar el chequeo de datos para una nueva elegibilidad. La idea es conectar las familias a asistentes capacitados y lingüísticamente compatibles para que los inscriban. Además, los estados tienen que ser auditados para que optimicen las elegibilidades, que no nieguen cobertura a nadie y que, en caso de cubrir a alguien no elegible, que no sean penados.

“Las personas latinas y afrodescendientes tienen muchas más chances de quedar afuera de Medicaid. Las pérdidas han sido inmensas para estas comunidades y en un año han excedido las cancelaciones históricas. Hoy, medicaid cubre a casi 4 millones menos de latinos, siendo que la pérdida más grande se registró en 2019 con un millón. Los afrodescendientes, por su parte, perdieron 2.7 millones de afiliados, la mayoría de los casos, por factores administrativos”.
Stan Dorn