Trump asume el poder: comentarios en El Fogón de Los Ángeles

En la misma rotonda del Congreso Nacional en donde cuatro años atrás extremistas de derecha asaltaron a funcionarios de seguridad en lo que se caracterizó como un intento de golpe de estado, Donald Trump juró defender a la Constitución y se transformó en el cuadragésimo séptimo presidente de los Estados Unidos.

En su discurso inaugural ante unas 600 personas que, dadas las bajas temperaturas de Washington, DC, se congregaron en la histórica rotonda del Congreso Nacional, el empresario de 78 años de edad dijo que venía como “pacificador y unificador” y que, a partir de ahora, comenzaba “la Era de Oro de los Estados Unidos”.

Pero en un segundo discurso informal realizado pocos minutos después, volvió con sus controvertidas temas argumentando, falsamente, que fue derrotado en las elecciones de 2020 porque hubo fraude y que los extremistas que asaltaron al Congreso Nacional el 6 de enero de 2021 eran patriotas.

En este segundo mandato, un Trump con experiencia gubernamental arriba con una detallada agenda, que fuera anticipada en el Proyecto 2025, que incluye la imposición de tarifas comerciales, declarar el estado de emergencia, deportaciones masivas, suspender la ciudadanía a los niños estadounidenses que tengan padres indocumentados, salir de los Acuerdos Climáticos de Paris, expandir los territorios estadounidenses con referencias a Panamá y Groenlandia, aplicar la pena de muerte en casos federales y neutralizar la ideología y valores promovidos por sectores progresistas.

Trump, como líder del movimiento populista reaccionario MAGA (´Make America Great Again´), asentado en el partido Republicano, también arriba con aliados de la derecha más que cuestionables. Uno de ellos es Elon Musk, el billonario que fue clave en financiar la campaña electoral de Trump y que integrará su gabinete con la misión de reorganizar las agencias y programas del gobierno federal bajo el lema de la eficiencia. Musk, en un discurso efusivo en el que celebraba la victoria de Trump, ya protagonizó un incidente que parecería simbólico de los tiempos que arriban. Al final de su discurso, Musk levantó su brazo derecho de tal manera que locutoras de CNN inmediatamente lo asociaron con el saludo usado por líderes totalitarios europeos de un momento triste de la historia mundial. Obviamente, se estaban refiriendo a Hitler y a Mussolini.

Comentarios

Hispanic LA invitó a que participantes de EL FOGÓN DE LOS ÁNGELES expresaran su opinión sobre este día histórico en que Trump ingresó por segunda vez a la Casa Blanca.

Mariano Saravia, Argentina
Me despierta horror la retórica del primer delincuente de la historia en ocupar la Casa Blanca. Durante la historia de los Estados Unidos, presidentes más conservadores o más «progresistas» han mantenido algún tipo de políticas de Estado imperialistas. Pero siempre fue bajo el eufemismo del «sueño americano» y vendiendo una imagen de meca de la libertad y la democracia. El punto culminante de esa estrategia fue después de la caída del Muro de Berlín, los años 90, con una hegemonía total y el recordado «fin de la historia» de Fukuyama. Hoy, en un mundo decididamente multipolar, Estados Unidos en lugar de potenciar sus alianzas, elige un presidente que se pelea con todos, con los latinoamericanos por el Canal de Panamá y por los migrantes, con Canadá, con Europa por Groenlandia… Esto no hará otra cosa que aislar cada vez más a una potencia en franca decadencia, y más decadente será cuanto más grite e insulte su presidente. Quienes más sufrirán este segundo mandato de Donald Trump serán los propios habitantes de Estados Unidos.

Adriana Briff, EE.UU.
El segundo mandato de Donald Trump es la toma del poder de los multimillonarios, organizados con el Proyecto 2025 y el desquicio tecnócrata de los que se sienten dios. Más de 76 millones de personas han votado al club de los poderosos, pero la cuota de ingreso estará muy lejos de sus bolsillos para poder pagarla y pertenecer. La resistencia será una forma de vida y nosotros sustentamos al capitalismo. Sin clientes no hay ganancias. Desobediencia civil y organización a muy largo plazo. Lo mejor para todos y mucha fuerza.

Ricardo Corzo Moreno, Venezuela
Debido al resultado electoral donde Trump no solo ganó claramente la mayoría del Colegio Electoral, 312-226, sino que también triunfó en el voto popular por más de dos millones de votos, y obtuvo mayorías tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado. Esta versión 2.0, será la de un Trump en esteroides, más envalentonado, con una visión geopolítica del mundo más unipolar en la cual los intereses imperiales de los EE.UU., estarán al centro de su política exterior. En lo interno favorecerá a sus amigos de las elites empresariales, en detrimento del ciudadano promedio y de las minorías, especialmente los inmigrantes y la comunidad LGTBQ.

Raúl Llarull, El Salvador
El programa de Trump contiene tres ejes centrales: China, Migracion, Energia. De ellos solo abordo los dos últimos. Señal del caracter aislacionsta (pero imperial) de su programa, intenta transmitir un poder que hace tiempo perdió el imperio. En ese sentido es más un discurso decimonónico que futurista, evocando los años de oro del expansionismo estadounidense. Su discurso del miedo solo refleja la propia debilidad en la lucha por sostener una hegemonía en decadencia. Al interior va dirigido su discurso a trabajadores y a quienes construyeron el país (ahí por conveniencia olvida a los migrantes). El rechazo de las agendas de diversidad sexual y demás busca asegurar una sociedad polarizada sobre la base de dividir para gobernar (discursos de odio que ya se vieron en AmLat y Europa) y que añade por supuesto la criminaliZacion de la migración. Su fortaleza parlamentaria e institucional puede permitirle algunas acciones, rápidas en política interior, pero otra cosa será su intención hacia el resto del mundo. México, sin duda tiene razones para preocuparse. Algo más: será sin duda un gobierno de los oligopolios tecnológicos en favor de los millonarios del sector que buscarán imponer sus intereses en la política exterior.

Carlos Kohan, EE.UU.
La asunción de Trump al poder representa, en mi opinión, un paso significativo más en la decadencia de un sistema social y económico que no puede dar respuestas a las necesidades de vastos sectores de la población. Tal como lo hiciera Hitler en la década de 1930, las clases altas han buscado desesperadamente un chivo expiatorio al que culpar de todos los fracasos del sistema. Si en aquel caso fueron los judíos, ahora son los inmigrantes. El gran triunfo de Trump, como el “con man” (estafador) que es, es haber convencido muchos sectores de la clase trabajadora y la clase media, de que él y su grupo de billonarios y de ultra-derecha van a defender los intereses de esa gente. El gran fracaso de los Demócratas es no haber expuesto esa mentira y haber ofrecido una alternativa real. Espero que en los próximos meses/años, la mentira quede al descubierto. Espero que se vea más claro que “el emperador no tiene ropa”. Y si eso llega a ocurrir, espero que haya un fuerte movimiento del péndulo en sentido opuesto. Esa sería una extraordinaria oportunidad para la asunción al poder de un verdadero movimiento progresista. Lamentablemente no veo la cúpula del partido Demócrata preparada para eso…. Pero hay tiempo y muchas cosas pueden cambiar. Nuestro trabajo va a ser resistir y favorecer ese cambio.

Bruno Rocha Lima, Brasil
La impresión de toma de posesión de Trump para su segundo gobierno es que va generar una ampliación de rechazo en algunas fracciones de clase dominante brasileña. Los medios hegemónicos ya se posicionaron contra las grandes plataformas, la Suprema Corte ya exigió un comunicado de Meta para saber si van a modificar el protocolo de chequeo por su cuenta o van a cumplir la ley nacional. Otra situación que se avecina es que Brasil no llegue a adherir de todo a la dinámica de China a partir de los BRICS, pero sí una posición a medias, negociando tanto con la Unión Europea como con los socios del bloque que controla el NDB. Para la sociedad brasileña, ya sufrimos un ataque puntual de ´fake news´, con una escala de difusión promocionada por X. Lo que más asusta es la penetración de la imbecilidad discursiva y un gobierno de predadores, donde los EE.UU. se transforman en una auténtica oligarquía, materializando el liberalismo económico distópico cómo una forma de dominio directo. El aliento es saber que ni a sus aliados externos Trump respeta, luego, puede aislar la Superpotencia, cancelando en parte su proprio ´soft-power».

Máximo Cargnelutti, México
Se prevén tensiones y negociación entre los gobiernos de EE.UU. y México. Las amenazas de deportaciones masivas y restricciones arancelarias preocupan y ocupan a las autoridades y empresas mejicanas. En los últimos diez años crecieron las inversiones «near shore» chinas en el norte de México para exportar a Estados Unidos manufacturas ‘Hechas en México» incluyendo componentes chinos e incluidas en el tratado comercial que incluye a Canadá. Se pretende implantar un «security shore» proteccionista. Los anuncios sobre Groenlandia, Canadá y Panamá también se enmarcan en la disputa comercial EE.UU.-China. Sobre los contenidos «culturales» racistas, misóginos, antigay, antiderechos, etc., es extrema derecha.

Francisco Lozano, EE.UU.
En su discurso de inauguración, no faltó su retórica contra los migrantes, normalmente es un discurso de agradecimiento; pero Trump no sabe hacer otra cosa. Se viene de nuevo su política contra migrantes de «Permanecer en México». Irónicamente, la inauguración coincidió con el Día de Martin Luther King. Un presidente racista juramentado en un día festivo que conmemora la lucha por los derechos civiles y contra la discriminación. El pastor Lorenzo Sewell oró con las palabras de King, como un reflejo del espiritu de King, pero definitivamente, no de Trump.

Sandra Fantini, Brasil
Hoy escuché de una amiga que vive hace más de 20 años allí en EE.UU., que la dupla Trump y Musk son la personificación del anti-Cristo. La capacidad del ser humano por querer más poder y control económico es tan grande que ignora totalmente que la “nueva Era de Oro”, que tanto promete para EE.UU., puede resultar en un gran desastre para las clases menos favorecidas, entre sus mismos compatriotas. La bandera que defiende ya viene manchada de sangre, dividiendo el país y permitiendo un futuro de mucha desinformación. Hoy es un día de luto para muchos que creen en los valores de los derechos humanos.

Jairo Duque, EE.UU.
En mi percepción, veo en esta presidencia una amalgama de factores que tradicionalmente yo veía incompatibles: 1. Trump llega a causa del mal gobierno Biden y el voto juvenil se lo cobra. 2. Demócratas y Republicanos han gobernado con un sistema financiero que está en crisis. 3. Los sectores populares americanos no tienen una dirección política alternativa que proponga soluciones diferentes. 4. El ajedrez geopolítico se está reacomodando hacia 3 puntos: EE.UU., China y Rusia. 5. Trump con un eje en una economía de hidrocarburos, ejecutará su agenda basada en MAGA, cruzando cualquier línea roja en DDHH y democracia, sin descartar aventuras genocidas y fascistas.

Nora Atienza, EE.UU.
Terrible su discurso. El mundo estará en manos de gente desquiciada.

B.D., EE.UU.
Me da una sensación de que todo se pondrá peor, que no habrá muchas garantías de nada, que seguro aplastarán todo lo que puedan a la clase media, ni hablar de la clase trabajadora!!! Serán años de lucha y no tengo esperanza de nada!!!! Siento que todo es inseguro! No se protegerá el medio ambiente para nada.

Verónica Federovsky, EE.UU.
El discurso y asunción de Trump, un líder de la supremacía blanca, se dio irónicamente en el Día de Martín Luther King, Jr. En este 2ndo término, Trump viene apoyado por tecnócratas billonarios que van a hacerse cargo de las redes sociales y los medios de comunicación, entre otras cosas. Anunció que habrá libertad de expresión, lo que es muy triste por lo irónico, ya que él siempre ha atacado como enemigos a los que piensan distinto, incluyendo al Pueblo. Es una página oscura de la historia de EE.UU., que incluirá persecución a inmigrantes y separaciones de familias, ataques a los derechos de las mujeres, la comunidad LGBTQ,  y otras minorías. La clase media y trabajadora van a sufrir mucho ya que va a destruir la economía y derechos de salud que Biden había logrado. Pero no va a poder hacer todo lo que quiere. Gracias a las organizaciones legales (como ACLU, etc.) muchas cosas irán a juicio. Las organizaciones de base y el Pueblo, en general, seguirán luchando y organizándose en resistencia.

Norma Villanueva, Argentina
Mi profunda disconformidad con la segunda presidencia de Donald Trump a pesar de que no vivo allí, es mi preocupación por el bienestar del mundo, creo que es importante poder expresar mis inquietudes. En particular, me preocupa la forma en que la administración de Trump ha abordado la política migratoria, el encarcelamiento de menores y la negativa a proporcionar un camino hacia la ciudadanía para los ´Dreamers´. Ejemplos de políticas inhumanas y divisivas.  Creo que es fundamental que los líderes trabajen para proteger los derechos y la dignidad de todos los individuos, independientemente de su estatus migratorio. Además, me preocupa profundamente la negativa de la administración de Trump a abordar el cambio climático de manera efectiva, y la negativa a implementar políticas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Creo que es fundamental que los líderes trabajen para proteger nuestro planeta y asegurar un futuro sostenible para las próximas generaciones.

Néstor Fantini, EE.UU.
El 24 de marzo de 1976, en las radios y televisores argentinos se escuchaban marchas marciales y comunicados de la Junta Militar que acababa de derrocar al gobierno. Había mucha incertidumbre, una sensación de miedo. No había certeza de lo que vendría. Como descubrimos, vino el terror. Un terror sin precedentes. No es lo mismo ahora. Repito, NO ES LO MISMO, pero hoy, 20 de enero de 2025, en una California de océano, montañas y desiertos, una California socialdemócrata desbastada por incendios, poblada de tantos hombres, mujeres y niños migrantes, siento una sensación similar. Ni mi experiencia política, ni mis credenciales académicas, parecen servirme. No estoy seguro de lo que se viene. De lo que sí estoy seguro, lo que no me cabe duda, a pesar de algunas voces disuasivas, es que hay que resistir. Resistir educando, escribiendo, marchando, levantando banderas que promuevan las instituciones democráticas y la justicia social.

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