«Will», un libro esencial para entender a un fenómeno

Este 27 de marzo será un día histórico en la carrera de Will Smith. A las 5 de la tarde en el teatro Dolby, en el corazón de Hollywood, Regina Hall, Wanda Sykes y Amy Schumer darán inicio a la ceremonia número 97 del Oscar. A juzgar por cómo han reaccionado frente a su trabajo en King Richard quienes votan los premios que se entregan con anterioridad a los de la Academia, Willard Carroll Smith Jr. es el favorito para derrotar a sus competidores, Benedict Cumberbatch, Andrew Garfield, Denzel Washington y Javier Bardem. Nominado en dos ocasiones previas, en 2002 por Ali y en 2007 por The Pursuit of Happyness, esta puede ser la vencida para este actor que algo sabe sobre el éxito, pero que hasta este año ha fallado en los grandes premios cinematográficos.

Quienes, antes de ese potencial gran triunfo, quieran entender quién es Smith y cómo ha logrado concretar una de las carreras más espectaculares del cine contemporáneo, cuentan con una gran herramienta en Will, el libro de memorias que ha escrito junto al renombrado autor Mark Manson, quien ha batido récords de venta con The Subtle Art of Not Fiving a F… publicado en español como El sutil arte de que te importe un carajo. Manson aporta a la voz de Smith una estructura literaria que a través de las 460 páginas de la edición en español realza la palabra de Will.

Con una franqueza que no se encontrará en ninguna entrevista, examina cada detalle de su vida, desde su infancia en un hogar de clase media en Filadelfia con un padre alcohólico y golpeador y una madre que celebraba cada expresión de su innato talento artístico hasta su reconocimiento de que no necesita ganar constantemente para ser feliz. Sus recuerdos también pasan por su temprano éxito como rapero y su transformación en estrella televisiva, su relación con el dinero y sus problemas con el fisco, su compleja relación con las mujeres y su búsqueda permanente del amor. Smith lo expone todo sobre su vida: nos habla de su primer matrimonio con Sheree Zampino, con quien tuvo su primer hijo, de su no siempre fácil relación con su actual esposa, Jada Pinkett-Smith, madre de Jaden y Willow, y de cómo el sentirse un cobarde siendo niño frente a las peleas entre sus padres lo ha llevado a confrontar los miedos arremetiendo contra ellos.

Buena muestra de ello es el último capítulo, donde cuenta con lujo de detalle cómo se arrojó de espaldas en paracaídas sobre el Gran Cañón del Colorado sólo porque le aterrorizaba la idea de hacerlo. La lectura de Will es también esencial para entender su trabajo en King Richard, donde interpreta a Richard Williams, el padre de las tenistas Serena y Venus Williams, quien las preparó desde niñas para que se convirtieran en las reinas mundiales de ese deporte sin ninguna certeza de que lo conseguiría pero sin dudar un solo instante frente a ellas.

En un encuentro con David Marchese del The New York Times para promocionar tanto el lanzamiento de su libro en inglés como el estreno de la película, confesó: «yo no hubiera podido interpretar a Richard Williams de esta manera sin haber examinado mi vida y entendido tantos aspectos de mi infancia y cómo eso afectó las decisiones que tomé como padre. Organicé mis memorias mientras trabajaba en King Richard y las dos cosas han ido de la mano. Mi capacidad como actor se incrementó en los últimos 18 meses. Ha sido uno de los saltos más intensos en comprensión emocional que he tenido en mi vida».

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Gustavo Del Cobre

Gustavo del Cobre es crítico de cine.

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