Palestina e Israel: Fe, Esperanza y Amor, por Ricardo Corzo Moreno
“Porque ahora sólo vemos un reflejo como en un espejo; entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; entonces conoceré plenamente, como soy plenamente conocido. Y ahora quedan estos tres: fe, esperanza y amor. Pero el mayor de ellos es el amor”.
(1 Corintios 13:12-13).
Como estudiante de la Biblia y de la historia, he leído muchos de los relatos convergentes que crearon una imagen de la tierra santa y la lucha actual que se desarrolla entre palestinos e israelíes, tanto del lado judío como de los territorios ocupados.
Siempre he afirmado el derecho de Israel a existir como Estado soberano dentro de unas fronteras seguras y reconocidas internacionalmente y el derecho de los palestinos a la autodeterminación, incluido el derecho al establecimiento de un Estado vecino independiente y soberano con el fin de establecer una paz justa y duradera.
Durante dos décadas serví en la Iglesia Presbiteriana en los Estados Unidos de América en diferentes capacidades: como moderador del Caucus Nacional Hispano/Latino y del Cross Caucus Étnico Racial, como miembro del Comité permanente de Abogacía para Asuntos Étnicos Raciales de la Asamblea General. Durante una década (1995-2005) desarrollé relaciones de amistad con varios cristianos palestinos, entre ellos el Rev. Fahed Abu-Akel, quien fue el primer palestino, y hasta ahora el único en ser electo, moderador de la Asamblea General (214ava) de la Iglesia Presbiteriana en Estados Unidos celebrada en el 2002 en Columbus, Ohio.
En el tema Israel-Palestina, solidaridad era una palabra que me producía sinceros deseos por la paz. Después de conocer a cristianos palestinos y escuchar sus historias la solidaridad se convirtió en empatía por la causa palestina, y deseos de seguridad para el pueblo judío. No me considero un experto en el tema Israel-Palestina, pero una década de relaciones directas con rabinos judíos y pastores cristianos palestinos en los Estados Unidos me permitió conocer más ampliamente, lo que antes conocía solo parcialmente, por medio de lecturas y por las distintas noticias en los medios de comunicación.
No deja de sorprenderme muchos cristianos que ni si quiera saben ubicar la franja de Gaza en un mapa mundial y repiten en coro, todo lo que les llega por las redes sociales, como si ahora fueran expertos en asuntos de Israel y Palestina. Algunos hasta se atreven a utilizar textos bíblicos sacados de contexto, para armar toda una escatología que responde más a su visión geopolítica del mundo, que lo que las escrituras que citan dijeron realmente a sus destinatarios originales.
El Rev. Dr. Jack Sara, es un cristiano que conoce mucho del tema Israel-Palestina. Creció en Jerusalén y es un líder muy respetado entre las Iglesias de la Alianza Cristiana y Misionera en Jerusalén. Jack estudio una licenciatura en biblia y educación en el Seminario Bíblico Alliance, luego obtuvo una maestría en Divinidades con énfasis en estudios pastorales. Posteriormente, obtuvo un doctorado en Misiones y Estudios Interculturales en el Seminario Teológico Gordon Conwell en los Estados Unidos.
Cito aquí un resumen de un mensaje más amplio compartido por el Rev. Dr. Jack Sara en relación a la situación actual en Palestina e Israel:
“En medio de estos tiempos difíciles, quiero acercarme a ustedes con una petición sincera. Nuestro país es testigo actualmente de un conflicto importante y angustioso. Nuestra fe en Jesús, quien nos enseñó: “Amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen” (Mateo 5:44), nos obliga a pedir el cese de todas las actividades terroristas y militares violentas que causan daño tanto a los palestinos como a los civiles israelíes. Nos entristecen los actos que tienen como objetivo a civiles, independientemente de su nacionalidad, etnia o fe. Oramos por un diálogo y una mediación sinceros y de buena fe para una paz justa y una reconciliación.
También sabemos que para alcanzar una paz verdadera y viable debemos abordar las causas profundas del problema. Los palestinos han estado experimentando injusticias y desplazamientos continuos durante más de 75 años. El asedio a Gaza debe terminar. La opresión, los muros, los asedios y la colonización no pueden traer seguridad ni paz”.
Según el Rev. Dr. Martin Luther King Jr., los principios que guían a la Comunidad de los Amados (Beloved Community) son «la resolución pacífica de los conflictos y la reconciliación de los adversarios, en lugar del poder militar.” Me duele ver a tantos cristianos apoyar e incluso promover las acciones militares como una respuesta apropiada a este conflicto histórico entre Israel y Palestina. No me cansare nunca de repetirlo, la violencia engendra mas violencia, y la guerra nunca es la solución a los conflictos de la humanidad.
Se desata el ángel de la muerte en el medio oriente
En estos momentos pareciera que el control y el dominio lo tiene el ángel de la muerte desatado por Hamas al realizar un ataque en contra de la población civil de Israel, entre la que se encontraban niños, mujeres y ancianos, además de ciudadanos de otros países. El ángel de la muerte también está presente en la respuesta militar del estado de Israel que está bombardeando al territorio Palestino y donde están muriendo muchos civiles inocentes, incluyendo niños, mujeres y ancianos.
Hasta el momento de escribir estas líneas según las últimas actualizaciones, más de 1.200 personas han muerto en Israel y más de 2.800 han resultado heridas en la guerra entre Hamás e Israel. Más de 1.900 personas han muerto hasta ahora en Gaza (Palestina) y más de 7.600 personas han resultado heridas hasta ahora en la guerra entre Palestina e Israel en Gaza.
Abadón (en hebreo: אֲבַדּוֹן), así como Apolión (en griego: Ἀπολλύων), son el nombre en hebreo y en griego de un ángel de la muerte mencionado en la biblia:
“Entonces salió otro caballo, rojo; y al que estaba montado en él se le concedió quitar la paz de la tierra y que {los hombres} se mataran unos a otros; y se le dio una gran espada.”
(Apocalipsis 6:4).
Por ahora el ángel de la muerte seguirá suelto, la guerra continuará, las respuestas militares se impondrán y lo hermoso de nuestra humanidad común seguirá siendo silenciado. En medio del estruendoso ruido de las metrallas y los misiles, de las medias mentiras y las medias verdades, los palestinos seguirán encerrados tras muros del corazón reforzados con alambres y cuchillas. Para la mayoría de nosotros, la vida seguirá como siempre, pero para los que lloran a sus muertos, en Israel y Palestina, la vida nunca volverá a ser la misma.
«¡Nunca más la guerra!»; «con la guerra, todo queda destruido»
Mi esperanza es que la paz, tan esquiva, se logre algún día entre ambos pueblos y finalmente triunfe el amor. No olvidemos que también hay una minoría de cristianos que son una parte integral del pueblo Palestino y comparten los mismos sufrimientos y las mismas esperanzas. Que la semilla del odio nunca encuentre más un lugar donde crecer en los corazones de jóvenes palestinos e israelíes. Y espero que en un futuro no muy lejano como dijo el Rev. Dr. Martin Luther King Jr.,” El amor y la confianza triunfarán sobre el miedo y el odio».
Presbítero Ricardo Corzo Moreno
/ Caracas, 13 de Octubre del 2023
Hola amigo, que bueno saber de ti… Esperando que estés bien, Exitos y Bendiciones!
Hola Yohana, que bueno que me leas, un gusto saber de ti. Escribeme a rvenezolano@yahoo.com