Literatura

24 aforismos El hombre no deja de ilusionarse porque envejece, más bien, envejece porque deja de ilusionarse. Mientras que la gente nos juzga por lo que hemos hecho, Dios nos juzga por lo que hemos sido. Hay países en los que nunca deja de suceder lo que siempre ocurre. Aquel…

A media mañana suelo venir a este bar, el bar de mi barrio; saludo amablemente a mis vecinos y me voy a sentar a una mesa del rincón, junto a un ventanal. Enseguida el mozo me hace una seña, y le confirmo lo de siempre.

Con la nicaragüense Norma Elena Gadea cantando “Mis Derechos de Mujer” como fondo musical, de nuevo nos juntamos en el Fogón de Hispanic LA, el 26 de septiembre...

Reflexionando es un nuevo libro de Rafael Carvajal, escritor colombiano radicado en Los Ángeles y autor de la serie Máximas y Mínimas que se publica en HispanicLA have años

Esperaba su visita, en setiembre, para dejarme convencer. Vendrá mañana, solo por tres meses.

Estas frases y nuevos aforismos son reflexiones tan simples como complejas y tan teóricas como concretas

el mar es más tibio que el aire / una gota se coagula por encima de adioses y rencores / esa precisa gota de sangre es mi patria 

Recordando a Mario Benedetti en el centenario de su nacimiento. Una de las escrituras uruguayas más lúcidas.

Se acercan las elecciones: que no ocurra nunca que el voto latino se dé por descontado, porque entonces se desvaloriza

El dinero siempre será necesario pero nunca importante. / Los políticos estúpidos creen que el pueblo es idiota. / El que dice dulces mentiras terminará saboreando amargas verdades.

South Pasadena, Pasadena, Glendale, Burbank, Arcadia, Azusa, Fontana, son apenas unas de numerosas ciudades del sur de California que fueron parte de esta y otras formas de discriminación y segregación étnica y racial, que incluía desapariciones y linchamientos.

Recalculando con Claudia Cardinale, un GPS temperamental, algo español y mexicano, que quiere que se doble a la derecha cuando hay ir por la izquierda

Las artes han sido no solo una manera de registrar la historia sino también de percibir y plantearnos el futuro.

A veces, en depresivas noches de invierno... condenado a la soledad del barrio, me cruzaba al mercadito a comprar cerveza.

Estuve enferma. Durante siete noches, dormí despierta. Un pájaro azul se posó en mi cama y una muerte con la cara derretida como una vela, me miró un segundo para no asustarme.